El infarto agudo de miocardio (IAM) es una de las principales causas de mortalidad y morbilidad en todo el mundo. A pesar de toda la investigación, hay una falta de marcadores tempranos para la prevención de los síndromes isquémicos agudos. Una investigación liderada por científicos del Institut Català de Ciències Cardiovasculars (ICCC) ha identificado cambios producidos en la Apolipoproteína J tras un IAM que podrían ser de gran utilidad para un diagnóstico precoz.