Un gen suicida, denominado 'gen E', procedente de colífagos, es capaz de inducir muerte en las células en las que se expresa. Científicos de la Universidad de Granada (UGR) han demostrado la eficacia de este sistema no sólo in vitro (utilizando cultivos de células tumorales), sino también in vivo, mediante el uso de animales de experimentación en los que fueron inducidos este tipo de tumores.