En el proceso de transferencia del ADN mitocondrial de las madres a su descendencia pueden darse diversos fallos. Por eso, un equipo del Centro Nacional de Investigadores Cardiovasculares ha buscado un mecanismo que previene estos posibles errores, el cual consiste en reemplazar las mitocondrias con alteraciones de la madre por mitocondrias de una donante sana.
Un estudio sobre la evolución del ADN mitocondrial, realizado por investigadoras de la Universidad Autónoma de Barcelona, ha determinado la frecuencia y el patrón de heteroplasmia en todo el genoma mitocondrial de una muestra representativa de la población europea. Los datos concluyen que muchas de las mutaciones identificadas acaban por no fijarse en la población, debido a la actuación de mecanismos evolutivos como la deriva o la selección.