Dos expediciones al Cono Sur de América, lideradas por investigadores del CSIC, han analizado el impacto geoquímico de unos 100 depósitos de ceniza asociados a la erupción de varios volcanes andinos durante los últimos dos millones de años. Gracias al proyecto, los científicos han desarrollado una metodología para determinar las repercusiones de las erupciones volcánicas sobre el medio ambiente.