La Administración autonómica está realizado en los últimos tiempos grandes esfuerzos en materia de ordenación de la I+D, empezando por la Ley de Coordinación del Sistema Valenciano de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico que se ha aprobado recientemente. Mª Amparo Camarero, al frente de la Secretaría Autonómica desde hace poco más de un año, ha aportado al cargo su experiencia en el mundo académico. Doctora en Económicas por la Universitat de València, es catedrática de Economía Internacional y Europea, dirigió el Departamento de Economía de la Universitat Jaume I de Castellón y ha liderado más de quince proyectos de investigación.
¿Podría citar las principales novedades que introduce la Ley valenciana de la ciencia?
En primer lugar, recoge actuaciones que ya existían e introduce dentro de la normativa a órganos asesores para así plasmar su papel en el Sistema Valenciano de Ciencia y Tecnología. Es el caso del Alto Consejo Consultivo, o la Agencia Valenciana de Evaluación y Prospectiva. Además, establece una estructura de la Matriz de Institutos Superiores de Investigación Cooperativa (MISIC) que son entidades que con carácter virtual van a agrupar a los investigadores. También se introduce un Registro de Investigadores y se recogen los principios de la Carta Europea de Investigador porque se pretende que dentro de la política de recursos humanos se sigan sus recomendaciones. En la Ley se introduce el carácter plurianual de los proyectos de investigación, que permitirá ser más flexible en la utilización de los recursos, así como los mecanismos que nos permitirán una mejor coordinación de las políticas dentro del propio Gobierno autonómico, a través de la Comisión Delegada del Consell en I+D. Por otra parte se prevé el CONCITEC, donde tienen participación todos los agentes que realizan investigación. En definitiva, creo que su objetivo es mejorar la coordinación y optimizar los recursos disponibles.
Dentro de esta Ley está previsto un Plan Estratégico para los próximos cinco años y la Generalitat ha contado con RUVID para elaborar el borrador. ¿Cuáles son los principales objetivos de dicho documento?
Desde la Conselleria, hemos querido que los agentes que realizan la investigación hagan un esfuerzo por concretar cuáles son las principales líneas y cuál es el futuro de la investigación, en qué puntos somos más fuertes y en cuáles somos más débiles para incidir sobre ellos. La idea es que este plan sea realista, describa la actual situación y se fijen objetivos a medio plazo. Asimismo, nos servirá para evaluar y avanzar en aquellos puntos donde podamos progresar. Es un Plan que debe englobar a todas las instituciones y demás agentes que realicen investigación. De alguna manera, a través de la Comisión Delegada en I+D, se intentará también coordinarlo con los demás planes estratégicos que existan en otras Consellerias que tienen atribuciones en esta materia.
Con la intención de presentar las líneas definidas en el borrador e iniciar un debate con los agentes, la Conselleria organizó en mayo las Jornadas sobre la Estrategia Valenciana de Ciencia y Tecnología (2009-2013), ¿podría hacer una valoración del acto?
Creo que fue muy positivo. Los asistentes representaban a los diferentes agentes del Sistema: universidades, centros e institutos de investigación de la Comunitat pero también de otras Comunidades Autónomas. Por un lado nos sirvió para ser conscientes de la necesidad de hacer este plan, para hacer aportaciones y para ver otras experiencias que puedan enriquecer la iniciativa. Estoy muy contenta con la experiencia, fue muy participativo y nos llevó a hablar a todos sobre la investigación, que es algo que hace falta.
Como ha indicado, a partir de ahora se inicia una nueva etapa de coordinación de las consellerias en materia de investigación con la creación de la Comisión Delegada y el CONCITEC...
Efectivamente. Estos dos organismos junto con un diseño de lo que se llama la gobernanza de la I+D que presentaremos en breve, permitirá tener esa visión de conjunto que en ocasiones queda deformada porque cada uno lleva sus líneas de actuación. Lo que queremos es sumar todos los recursos porque en tiempos de problemas económicos es conveniente optimizar los recursos de los que ya disponemos siendo conscientes de que es difícil aumentarlos.
En cuanto a la financiación de la investigación, usted explicó durante las Jornadas que uno de los objetivos del Consell era dotar a los grupos de recursos para afianzarse en el panorama internacional pero a la vez insistía en la evaluación de resultados.
Es muy importante no solo evaluar los proyectos cuando se solicitan, sino también evaluar ex post sus resultados. Esto ya se hace a través de la presentación de memorias pero hemos de ser más exhaustivos en el análisis de los resultados para compararlos con lo que se proponía al principio. Esto será posible gracias a un nuevo servicio que se ha creado en la Conselleria. Esperemos que, además, nos permita difundir mejor los resultados que se obtienen porque queremos profundizar en la comunicación del trabajo de nuestros grupos de investigación. Pensamos que es necesario para que la sociedad valore esta labor y atraiga el interés de los jóvenes hacia la ciencia.
Como ya ha comentado, la Ley contempla la figura de la MISIC, ¿cuándo se estima que entrará en funcionamiento?
Se está diseñando la estructura jurídica que prevemos terminar antes de finales de año. A partir de entonces se podrá ofrecer a los diferentes grupos de investigación posiblemente a través de una convocatoria, aunque todavía hemos de decidir la manera de implantarlo.
La idea es reconocer los grupos que ya existen y ofrecerles recursos adicionales para que se consoliden. En el fondo, algunos ya están identificados gracias al programa Prometeo por lo que nuestro objetivo es incidir sobre aquellos grupos que tienen mayor calidad dentro de la investigación en nuestra Comunidad y ayudarles para que mantengan las redes que ellos mismos ya han formado permitiéndoles que las extiendan y que difundan sus proyectos. Se trata en definitiva de consolidar los grupos existentes y facilitarles el trabajo.
La investigación ya no tiene una dimensión regional, española, ni siquiera europea sino mundial. Ya no hace falta estar en una misma ciudad para trabajar juntos, obviamente hay ocasiones en las que sí es necesario como para compartir laboratorios para llevar a cabo experimentos conjuntos, sin embargo, en otros casos a través de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación, la colaboración es factible. Creo que esto hay que impulsarlo porque no es necesario que exista un edificio para que un instituto sea exitoso.
La Conselleria ha puesto en marcha una iniciativa que consiste en un Registro de Investigadores y Grupos de Investigación. ¿Qué objetivos se persiguen? ¿Qué efectos tendrá o cómo les beneficiará a los científicos?
Se pretende que los investigadores cada vez que tengan que presentar una solicitud a la Administración autonómica, no tengan que volver a rellenar los impresos con información que ya deberíamos tener. La idea es compartir la información verificada que el investigador va introduciendo de forma regular en la base de datos de su universidad para de este modo reducir los trámites burocráticos. Estos datos nos servirán, por un lado, para tener nosotros constancia de quién hace investigación, es decir, un mayor conocimiento de los recursos de los que disponemos. Si necesitamos, por ejemplo, un evaluador de un tema concreto, podremos detectar quién nos puede ayudar. Por otro lado, puede servir para que los mismos investigadores realicen búsquedas, pongamos por caso para encontrar socios para un proyecto. Por supuesto se respetarán todas las leyes de privacidad de la información y nuestra intención es coordinarnos con la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología que está creando el currículo normalizado.
El formato será de portal web con unas secciones abiertas al público en general y que contendrá convocatorias de ayudas y noticias de investigación. Otra parte será de acceso restringido donde los investigadores entrarán a la base de datos con una contraseña. El proyecto está en una fase avanzada y calculo que dentro de un año debería estar funcionando.
También ha anunciado el relanzamiento de la Fundación Valenciana de Investigación, ¿cuál será su cometido?
Tendrá una dimensión de formación de investigadores mediante un Centro Internacional de Posgrado y a la vez articulará el Sistema Valenciano realizando acciones como las que estamos comentando. Además servirá para la puesta en comunicación con empresas dedicadas a la investigación que necesiten personal y nos permitirá acceder a ciertos proyectos de investigación no abiertos a la Administración pública. Incluso será un revulsivo para crear grupos grandes y que puedan acceder a convocatorias más ambiciosas.
Se ha aprobado recientemente el Decreto de Explotación de Invenciones. ¿Solamente es de aplicación para las investigaciones realizadas por entidades dependientes de la Generalitat?
Sí, era una reivindicación que existía, sobre todo por parte de las instituciones, sobre todo desde el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias. Este decreto permitirá una mayor protección de los resultados de investigación.
En las Jornadas se citó la necesidad de un “pacto por la ciencia en la Comunitat” para garantizar una estrategia de I+D estable y duradera.
Esa es nuestra intención, empezando por la aprobación de la Ley de Coordinación presentada en las Cortes. De hecho, varios de los vicerrectores de Investigación de las universidades valencianas acudieron porque estaban satisfechos con el resultado y recibió el voto positivo de Compromís pel País Valencià. También mantuvimos contactos con el PSPV para que se adhiriera, aunque al final esto no fue posible. Nuestro propósito es que este tipo de medidas sean permanentes en el tiempo, estables, porque la única forma de realizar investigación adecuadamente es tener una certeza sobre la estabilidad de los recursos. En este momento estamos consolidando diferentes programas, concentrando los recursos y simplificando los trámites. Por ejemplo, con la Orden Única hemos agrupado todas las convocatorias de ayudas de la Conselleria con el fin de que el proceso sea más claro y sencillo con una reducción significativa de la parte administrativa, esperamos facilitarlo todavía más con el Registro de Investigadores.
¿Cuáles considera que son las fortalezas y debilidades del Sistema Valenciano de Ciencia?
Es difícil concretar en el caso valenciano porque tanto las debilidades como las fortalezas las comparte generalmente con el sistema español porque estamos sujetos a la misma normativa. Creo que hay bastante burocracia en general, hay rigidez en las instituciones tanto en los centros de investigación como en las universidades. Esto complica el funcionamiento de los grupos de investigación por las restricciones a la movilidad. Otra problemática que hemos detectado es que cada vez se publica más, pero es complicado conseguir que sean realmente relevantes y que tengan repercusión internacional. En este aspecto, hemos de ser más ambiciosos.
Dicho esto, hay recursos humanos y económicos. Cada vez se es capaz de captar un mayor número de fondos y creo que hay grupos que son muy potentes en ciertos ámbitos. Por lo tanto, debemos contribuir a eliminar las barreras, flexibilizar el sistema, a facilitar la comunicación entre grupos para que el trabajo sea más efectivo y continuar apoyando lo que funciona correctamente.
¿Podría hacer una valoración de la política del Estado en materia de I+D? ¿Cuál es su opinión de la Ley de la Ciencia?
Hace un año se desgajó Universidades del Ministerio de Educación y se unió al de Ciencia e Innovación, ahora se vuele a dividir Universidades de la investigación. Estos cambios complican mucho la situación porque programas que se acababan de poner en marcha ahora tienen las competencias distribuidas entre dos ministerios, lo cual significativa más burocracia e inseguridad para los investigadores.
Con respecto al borrador de la Ley de la Ciencia, no responde a algunos de los problemas que existían. En la Comunitat, por ejemplo, hemos anunciado recientemente que se convertirán las becas de investigación predoctorales. Hasta ahora, se seguía el modelo de 2 años de beca y 2 de contrato de investigación, pero pronto esto se modificará con un nuevo programa en el que desde el principio el investigador en formación pasará directamente a ser investigador y no becario. Por tanto, aquí se ha tomado esta decisión pero la Ley de la Ciencia no contempla esto a nivel nacional.
Hemos observado que otros temas quedan confusos, pero de momento todavía está en proceso de borrador por lo que hemos hecho alegaciones con aportaciones sobre los puntos que nos han parecido que eran mejorables. En general creo que es bueno tener una nueva ley porque la ciencia desde los años ochenta ha cambiado bastante pero obviamente no facilita las cosas el hecho de que haya tantos cambios ministeriales.