La Unidad Docente de Fitotecnia General y Cultivos Extensivos del Departamento de Producción Vegetal de la UPV estudia las especies cespitosas comercializadas que mejor se adaptan a los campos de golf de la cuenca del Mediterráneo.
La gran mayoría de las semillas de especies utilizadas como césped que se comercializan en España, se producen en el extranjero -principalmente en Estados Unidos y norte de Europa-, por lo que antes de registrarlas es indispensable ver su comportamiento en nuestras condiciones climáticas. El grupo de investigación de la UPV especializado en este ámbito, dirigido por el ingeniero agrónomo Diego Gómez de Barreda, lleva una estrecha colaboración con una empresa valenciana desde hace varios años para analizar esta adaptación de variedades a las condiciones del Mediterráneo.
Como parte de esta línea de investigación, la Universidad evalúa en su parcela de ensayos ubicada en el Camino de Vera más de 50 parcelas de dos metros cuadrados de variedades de clima templado de especies cespitosas. Se realizan evaluaciones mensuales de su aspecto general, a partir de parámetros como la textura de hoja, el color, la homogeneidad, resistencia a enfermedades, etc. Fruto del estudio la Unidad de Fitotecnia ya ha publicado varios artículos en revistas especializadas en el mundo del golf.
Otra línea de investigación que llevan a cabo Diego Gómez de Barreda y su equipo es la resiembra otoñal de los campos de golf. Como explica el investigador: “En el área mediterráneo, la mayor parte de las calles de los campos de golf está sembrada con la especie Cynodon dactylon (grama o hierba bermuda) debido a su alta resistencia al calor, la sequía y al riego con aguas de baja calidad. Sin embargo, le afecta el frío y durante el invierno deja de crecer y pierde el color verde hasta que vuelven a subir las temperaturas a finales de la estación invernal. Por esta razón, a finales del mes de septiembre se resiembran las calles con variedades de especies cespitosas de clima frío que aportan el color verde a toda la superficie”.
En este sentido, el investigador ha dirigido estudios durante los últimos 3 años para comprobar qué especie es más adecuada para estas resiembras otoñales, la mejor variedad comercial, e incluso a qué dosis de siembra es la más conveniente. El proyecto se presentó el año pasado en un congreso científico y ha recibido reconocimientos como un premio al mejor Proyecto Fin de Carrera relacionado con temas deportivos en 2008 de la Cátedra Obradis-UPV por el proyecto titulado "Comparación de variedades de césped para resiembras ("Overseeding") en campos de golf".
La resistencia a la salinidad
El tercer conjunto de investigaciones en el que colabora la UPV y la empresa Semillas Dalmau está centrado en la resistencia a la salinidad. En España, debido a la falta de agua, muchas veces se riegan los céspedes con aguas de mala calidad, como aguas procedentes de depuradoras o aguas con un contenido en sales elevado. Debido a esto, explica Diego Gómez de Barreda que es tan importante evaluar el efecto que el riego con esta agua produce sobre las diferentes variedades de especies. Así, la Unidad de Fitotecnia ha realizado en lo que llevamos de año 2 ensayos con 32 variedades cada uno en el que riegan con aguas de diferentes niveles salinos y procedencias, con lo que ha quedado en evidencia que algunas variedades son más resistentes que otras a la salinidad.
El Departamento de Producción Vegetal de la Universidad Politécnica de Valencia fue elegido recientemente por el principal organismo de control y certificación de variedades francés, GEVES, como entidad colaboradora para evaluar la adaptación de las nuevas variedades de especies de césped a las particularidades del clima mediterráneo. Está previsto que los ensayos de la Unidad Docente de Fitotecnia General y Cultivos Extensivos comience este año con la siembra de las primeras 45 variedades de semillas, que serán suministradas por el GEVES.