Científicos del Reino Unido han desarrollado un pequeño robot de un metro de altura, que se utilizará para estudiar la adquisición de habilidades lingüísticas utilizando los mismos métodos que los padres usan para enseñar a sus hijos. El androide estará disponible el año que viene.
Los investigadores Chrystopher Nehaniv y Kerstin Dautenhahn, especialistas en inteligencia artificial de la Universidad de Hertfordshire (Reino Unido), han diseñado el robot, bautizado como iCub, para realizar distintos experimentos sobre la interacción del lenguaje del robot y del ser humano para conseguir que hable con personas.
Los experimentos con el robot iCub incluirán actividades como la inserción de objetos de varias formas en los correspondientes agujeros de una caja, series de moldes y bloques de madera. Luego, se le pedirá que nombre los objetos y acciones para que adquiera frases básicas como “robot pone palo sobre cubo”.
“Nuestro enfoque es que el robot use lo que aprende de otros para defenderse por sí mismo en la adquisición del lenguaje, y que use estas habilidades lingüísticas para controlar su aprendizaje social y las habilidades de manipulación. Esto crea, a su vez, un ciclo de retroalimentación positivo entre el uso del lenguaje y el desarrollo de otras habilidades cognitivas. Como un niño que aprende por imitación de sus padres y la interacción con el medio que lo rodea, el robot dominará principios básicos de gramática estructurada, como por ejemplo, la negación”, explica Nehaniv.
Según los investigadores, la investigación científica y tecnológica del proyecto tendrá un impacto significativo en la futura generación de sistemas robóticos interactivos dentro de los próximos diez años y en el liderazgo de Europa en esta área.
“ICub nos llevará un paso adelante en el desarrollo de robots como compañeros sociales. En un año tendremos el primer robot humanoide capaz de desarrollar habilidades lingüísticas”, concluye Dautenhahn.