Un estudio conjunto llevado a cabo en Cataluña con roedores demuestra que un medicamento antimalárico encapsulado dentro de nanopartículas es mucho más eficaz in vivo que el fármaco libre. Esta envoltura, además, evita que el parásito causante de la malaria se haga resistente al tratamiento.
Una investigación recién publicada por investigadores de centros catalanes indica que ciertas nanopartículas utilizadas para encapsular el fármaco contra la malaria hacen el tratamiento más efectivo.
El estudio, publicado en el Journal of Controlled Release, ha sido realizado por investigadores del Centro de Recerca en Salut Internacional de Barcelona –CRESIB- y del Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC).
Según el estudio, estas partículas reconocen varias especies de Plasmodium –el parásito causante de la malaria– y esto amplía su alcance potencial como adyuvantes terapéuticos contra la enfermedad infecciosa; es decir, como agentes de refuerzo que aumentan la eficacia del tratamiento.
Xavier Fernàndez Busquets, investigador de ISGlobal que ha liderado este estudio, explica que “estos polímeros capaces de encapsular fármacos antimaláricos presentan baja toxicidad, alta biodegradabilidad y la interiorización selectiva en glóbulos rojos infectados por Plasmodium, de especies tan divergentes como humanos y ratones”.
La terapia actual contra la malaria necesita estrategias capaces de dirigir fármacos a las células parasitadas por Plasmodium. El equipo de Fernàndez Busquets ha explorado unas nanopartículas llamadas AGMA1 e ISA23 como ayudantes de los fármacos contra el patógeno.
Los resultados del trabajo muestran que uno de los componentes estudiados, AGMA1, tiene actividad antimalárica por sí misma y ambas nanopartículas se unen preferentemente a glóbulos rojos infectados por Plasmodium respecto a los no infectados.
Candidatos prometedores
Además se muestran como diana contra el propio parásito en especies tan divergentes como Plasmodium falciparum y Plasmodium yoelii, que infectan a seres humanos y a ratones, respectivamente.
En el estudio, la inyección de 0,8 mg/kg del fármaco conjugado con las nanopartículas curó a ratones infectados por P. yoelii, mientras que los animales control, tratados incluso con dosis dos veces más altas del medicamento, no sobrevivieron.
Fernàndez Busquets asegura que las nanocápsulas desarrolladas por su equipo “pueden considerarse candidatos prometedores en el campo terapéutico antimalárico”.
Referencia bibliográfica:
Urbán P, Valle-Delgado JJ, Mauro N, Marques J, Manfredi A, Rottmann M, Ranucci E, Ferruti P, Fernàndez-Busquets X. Use of poly(amidoamine) drug conjugates for the delivery of antimalarials to Plasmodium. J Control Release. 2014 Jan 7;177C:84-95