Cuantos más medicamentos se consumen, mayor es la probabilidad de padecer disfunción eréctil. Esta es la conclusión a la que han llegado expertos estadounidenses tras un estudio en casi 38.000 hombres de California (EE UU). Sus autores aconsejan reducir las dosis al paciente en cada visita, evitar la sobremedicación y fomentar el ejercicio físico y la dieta sana.
A medida que aumenta el número de fármacos que consume un hombre, mayor es el riesgo de que sufra disfunción eréctil. Es la conclusión principal de un estudio elaborado por expertos de Estados Unidos que se publica esta semana en la revista British Journal of Urology International.
“Existe una asociación, que depende de la dosis, en la que tomar un mayor número de medicamentos con o sin receta pueden empeorar el grado de la función eréctil del hombre”, explica a SINC Diana Londoño, investigadora del Centro Médico Kaiser Permanente, en Los Ángeles, EE UU, y autora principal del estudio.
Londoño recuerda que esta asociación se da aun considerando problemas médicos como el tabaquismo y el aumento de peso. Además apunta que “en la literatura médica existen algunos medicamentos como los bloqueadores para tratar la presión arterial y los problemas de corazón, antidepresivos como los inhibidores de serotonina y el litio, diuréticos como la tiazidas o la espironolactona, fármacos para combatir úlceras como la cimetidina, etc., que pueden provocar disfunción eréctil como efecto secundario”.
La investigadora cree que “la gente tiende a pensar que si el medicamento se lo han recetado, no será dañino usarlo para otras enfermedades sin consultar con su médico, lo que puede tener efectos no deseados”.
Según los datos del trabajo, los hombres que consumen hasta dos medicamentos tienen un riesgo del 16% de sufrir problemas de erección, mientras que los que toman entre tres y cinco fármacos distintos tienen casi un 20% de probabilidades de padecer este problema. Para los que se medican con entre seis y nueve tratamientos, el porcentaje aumenta hasta un 25,5% y para aquellos que toman diez o más medicamentos llega hasta casi un 31%.
El estudio también reveló que el 57% de los participantes tomaban más de tres medicamentos y que el 25% de tomaba por lo menos diez medicamentos. Observando estos datos, la líder de la investigación reconoce que “es posible que los hombres estén sobremedicándose”.
Para Londoño, “una solución es contar con una lista exacta de los fármacos que los pacientes están tomando y tratar de reducirlos en cada visita”.
Otra de las medidas propuestas por los urólogos pasa por “controlar y reducir la cantidad de medicación todo lo posible y fomentar en los pacientes métodos como el ejercicio o la dieta sana para mejorar su salud, su función eréctil y la calidad de vida en general”, declara Londoño.
La líder de esta investigación opina que “los médicos de atención primaria y urólogos deberían considerar la polifarmacia como causa de disfunción eréctil”.
Este abuso de medicamentos “se asocia generalmente con errores de dosis, de tiempo, especialmente en los ancianos y perjudica la salud debido en parte a los efectos secundarios de la combinación de los diferentes tipos de fármacos”, aclara la autora.
La investigación se centró en “la suma de todos los medicamentos, ya sea de venta libre o recetados que contribuyen a la disfunción eréctil”, aclara Londoño.
Los autores del estudio preguntaron a 37.712 hombres de entre 45 y 69 años de diferentes grupos étnicos en el sur de California entre enero de 2002 y diciembre de 2003. La investigadora principal reconoce que “los resultados podrían ser ligeramente diferentes en una comunidad que no fuera tan diversa”.
Referencia bibliográfica
Diana C. Londoño, Jeff M. Slezak, Virginia P. Quinn, Stephen K. VandenEeden†, Ronald K. Loo and Steven J. Jacobsen. “Population-based study of erectile dysfunction and polypharmacy”. British Journal of Urology International. doi:10.1111/j.1464-410X.2011.10761.x