Un nuevo estudio centrado en diamantes cebra, protagonistas del #Cienciaalobestia, demuestra que las primeras experiencias de su vida influyen mucho en la construcción de los primeros nidos de las aves.
El diamante cebra (Taeniopygia guttata), un pequeño pájaro muy sociable originario de Australia y Asia, construye su primer nido utilizando materiales conocidos y la técnica que ha observado de otros ejemplares adultos. Así lo revela un nuevo estudio, publicado en la revista Behavioral Ecology.
“Este trabajo es importante porque desmiente el antiguo mito de que las aves construyen nidos que se parecen al nido en el que nacieron. Esto hace que la construcción sea un sistema modelo útil para probar experimentalmente cómo los animales aprenden sobre las propiedades físicas del mundo”, indica Lauren Guillette, profesora en la Universidad de Alberta (Canadá) y líder del proyecto.
Según las observaciones, las preferencias de los materiales –diferenciados por colores– están determinadas por la experiencia juvenil, pero “solo en presencia de un adulto”, subraya Guillette. Tanto los materiales como la presencia de un ave adulta en sus primeras etapas de vida son dos aspectos clave que marcan la preferencia por la materia prima empleada y la velocidad de construcción de su primer nido.
En sus experimentos, los investigadores controlaron el entorno en el que crecieron los diamantes cebra. Cada pájaro eclosionó en un nido de un color específico: rosa o naranja. A medida que las aves crecieron, fueron emparejadas con otra ave de la misma edad.
Después, algunas parejas se juntaron con un ave adulta en un ambiente con materiales de color diferente respecto al nido en el que nacieron. En otros casos, las parejas jóvenes estuvieron solo con otra ave adulta sin cambiar de materiales, o pudieron experimentar diferentes materiales sin interactuar con un adulto. También hubo parejas que no se relacionaron con ningún adulto y no probaron otros materiales.
Así, los investigadores pudieron determinar si las aves construyen su primer nido con un color que coincide con su nido natal, o con el color que experimentaron durante su crecimiento.
Los resultados muestran que a medida que los jóvenes diamantes cebra se embarcaban en la construcción de su primer nido, la mayoría de las aves preferían usar materiales a los que habían tenido acceso mientras crecían, pero solo si un adulto había estado presente durante este tiempo.
Además, las aves que no se habían relacionado con un adulto o probado un material diferente fueron entre tres y cuatro veces más lentas en la construcción del nido.
“Estos resultados muestran que los jóvenes diamantes cebra combinan señales sociales y ecológicas relevantes, como la presencia de un adulto y el color del material, cuando desarrollan su preferencia por el material”, concluye Alexis Breen, primer autor del estudio e investigador en la Universidad de St Andrews en Escocia.
Referencia:
Alexis J. Breen et al. “Juvenile socio-ecological environment shapes material technology in nest-building birds” Behavioral Ecology 30 de abril de 2020