La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha presentado esta semana el satélite Paz, que estará en órbita en 2013 y permitirá obtener hasta 100 imágenes al día de la superficie terrestre con una resolución de hasta un metro. La nave dispone de un sistema para detectar la posición de cualquier buque en el mundo que pueda verse afectado por un secuestro.
España se convertirá en unos años en “el primer país europeo que dispondrá de un sistema dual de observación de la Tierra, radar y óptico, y de doble uso, civil y militar”, según ha destacado este martes la ministra de Defensa, Carme Chacón, durante la presentación del satélite Paz.
La ministra ha explicado que la tecnología radar de este satélite, cien por cien desarrollada y fabricada en nuestro país, permitirá obtener hasta 100 imágenes diarias de la superficie terrestre, con una resolución de hasta un metro. A estas capacidades se unirán en tres años las provenientes del satélite Ingenio, de tecnología óptica.
Paz estará en órbita en 2013 y podrá detectar la posición de cualquier buque en el mundo que pueda verse afectado por un secuestro, gracias al sistema de identificación automática AIS. Además, permitirá llevar a cabo de forma más sencilla y eficaz las tareas de vigilancia de control fronterizo, la verificación de tratados internacionales, el seguimiento y la evaluación de los desastres naturales, o el control medioambiental.
Desde su fabricación hasta su lanzamiento, el satélite generará 425 puestos de trabajo de alta cualificación en España, y cuando esté en órbita se crearán otros 80 empleos más.
El nuevo satélite, que cuenta con tecnología radar y alta resolución, fue encargado a finales de 2007 por parte del Ministerio de Defensa a Hisdesat, en el marco del Plan Nacional de Observación de la Tierra, para satisfacer los requisitos operativos de las Fuerzas Armadas.
A su vez, esta empresa contrató el diseño y fabricación del satélite a EADS CASA Espacio, con lo que es la primera vez que la industria espacial española asume el reto de construir un satélite de este tamaño y complejidad, ensamblado y fabricado íntegramente en España.
Lanzamiento para finales de 2012
Por su parte, Hisdesat ha contratado el lanzamiento del satélite con el lanzador ruso DNPER, previsto para finales de 2012. Paz, que está diseñado para una misión de cinco años y medio, tiene cinco metros de altura y 2,4 metros de diámetro, con un peso total de unos 1.400 kilos.
El INTA es el responsable del desarrollo del segmento terreno del programa, que incluye estaciones de control y seguimiento en Torrejón (Madrid) y Maspalomas (Gran Canaria) así como los centros de procesado y almacenamiento de datos.
La presentación del satélite Paz se ha realizado en las instalaciones de EADS CASA Espacio, y han asistido la ministra de Defensa, Carme Chacón; el jefe de Estado Mayor de la Defensa, José Julio Rodríguez; el secretario de Estado de Defensa, Constantino Méndez; la secretaria general de Industria, Teresa Santero; el consejero delegado de Hisdesat, Roberto López; y el director general de Astrium España, Antonio Cuadrado.
El satélite dispone de “una sofisticada tecnología, que permitirá a nuestro país tener un papel muy relevante en el ámbito de las imágenes por satélite de alta resolución”, ha señalado Roberto López. Y gracias al Paz, España poseerá capacidad de observación en todo momento, de día y noche y en cualquier condición meteorológica, ha destacado Antonio Cuadrado.
La ministra de Defensa también ha recordado el empuje y la innovación de la industria aeroespacial española, que se ha posicionado en unos años como la quinta potencia en Europa.
“Muy pronto empezaré en el Centro Europeo de Astronautas (Alemania), donde me formaré en supervivencia, buceo, preparación física y mental, programas espaciales...”, ha explicado la primera mujer de España que accede a esta formación, junto a otros astronautas de reserva de la Agencia Espacial Europea.
La Agencia Espacial Europea ha contratado a la empresa Deimos Space para integrar en Puertollano (Ciudad Real) un ‘objeto contenedor de evaluación de reentrada destructiva’. Este satélite recogerá valiosas mediciones durante su reentrada y ruptura reales en la atmósfera, lo que ayudará a disponer de sistemas espaciales más desechables frente al aumento de la basura espacial.
