El comprador aprecia la comodidad y ha reducido sus visitas mensuales a los establecimientos con un media de 16 visitas en 2008 frente a las 21 de 2002, según los datos de un estudio presentado esta mañana por José Miguel Herrero, Subdirector General de Estructura de la Cadena Alimentaria del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) durante la Jornada “Comercio y Consumo” celebrada en Burgos.
En su intervención, José Miguel Herrero ha abordado los cambios en los hábitos de compra de los consumidores y ha indicado que durante el período comprendido entre julio de 2008 a junio de 2009, los consumidores han empleado media hora menos a la semana en la cesta de la compra que hace cuatro años. Así, en 2008 utilizan un tiempo medio de 2 horas y 45 minutos, mientras que en 2004 era de 3 horas y 20 minutos.
El estudio señala además que los factores que deciden a la hora de elegir un establecimiento son la calidad de los productos y los precios. Asimismo, los días preferidos por los consumidores para comprar alimentos son los sábados (17%) y los viernes (16%).
Por otro lado, los factores que influyen en los consumidores a la hora de elegir un establecimiento también han cambiado en los últimos cuatro años. En la actualidad se valora la calidad de productos con un 62,1% frente al 57,3% de 2004, seguido de los buenos precios con un 55,5%, siendo de 39,5% en 2004
Respecto a la fidelidad que los consumidores con el establecimiento de compra, los datos indican que el 81,4% asegura “que le gusta hacerlo en los mismos establecimientos”, el 78,1% lo hace en los más cercanos a su domicilio, el 58,8% compra en los establecimientos de la misma cadena y el 26,1% cambia de establecimiento con cierta frecuencia.
En cuanto a los horarios comerciales, el 86,8% de los compradores opinan que son adecuados, al igual que el 75,6% los trabajadores de los distribuidores.
La compra de productos de alimentación a través de Internet se sitúa en 2008 en un 4,7% frente al 2,7% de 2004. En este contexto, los distribuidores que ofrecen su compra por Internet son en 2008 un 26,7%, mientras que en 2004 eran un 25,5%.
Un equipo de investigadores del Instituto INGENIO (CSIC-UPV) y la Universidad de Oslo han analizado un total de 103 regiones europeas y ha concluido que aunque en general la desigualdad parece disminuir al aumentar las habilidades digitales de la población, si se analiza por grupos concretos, esta disminución solo se da entre las clases media y alta.
El crecimiento económico suele considerarse una forma segura de aumentar el bienestar de las personas en los países menos desarrollados. Sin embargo, un estudio dirigido por la Universidad Autónoma de Barcelona y la Universidad McGill de Canadá sugiere que existen buenas razones para cuestionar esta suposición.
