El teletransporte es posible, al menos a escala cuántica. Dos equipos científicos han logrado hacer transferencias remotas de información cuántica codificada en partículas de luz a lo largo de varios kilómetros de redes de fibra óptica en las ciudades de Hefei (China) y Calgary (Canadá). El avance abre el camino hacia las comunicaciones del futuro, como la internet cuántica.
La revista Nature Photonics publica esta semana dos estudios independientes sobre teletransporte cuántico, uno realizado en China y otro en Canadá. Los autores han logrado realizar una transferencia remota de un lugar a otro de información cuántica codificada en partículas de luz a lo largo de varios kilómetros de redes de fibra óptica en dos ciudades distintas: Hefei (China) y Calgary (Canadá).
Ambos trabajos muestran que el teletransporte cuántico a través de redes metropolitanas es tecnológicamente factible y abren el camino hacia tecnologías y las redes de comunicaciones del futuro, como la internet cuántica. La tecnología tiene el potencial de mejorar en gran medida la seguridad y la velocidad de las conexiones de internet, según los científicos implicados en los proyectos.
Sin embargo, el teletransporte cuántico en largas distancias, utilizando una red de fibra, requiere fuentes de luz independientes, y esto presenta un desafío tecnológico: el haz de luz de una fuente tiene que seguir siendo indistinguible del haz de luz de la otra fuente después de haber viajado a través de varios kilómetros de fibra, que se instala en un entorno sometido a cambios constantes.
Para superar este obstáculo, ambos grupos desarrollaron de forma independiente varios mecanismos de retroalimentación y de sincronización.
Longitudes de onda
Los investigadores Qiang Zhang y Pan Jianwei, junto con su equipo de la Universdad de Ciencia y Tecnología de China, implementaron su prueba de campo en Hefei y utilizaron luz en la longitud de onda de las telecomunicaciones, tal como se utiliza en las redes actuales, para reducir al mínimo la velocidad en la que la luz de la señal pierde intensidad en la fibra.
Por su parte, Wolfgang Tittel y sus colegas de la Universidad de Calgary llevaron a cabo su prueba en esta ciudad canadiense. Usaron fotones en una longitud de onda de telecomunicaciones y también en una longitud de 795 nanómetros (nm), lo que permitió que el experimento de teletransporte cuántico fuera más rápido que el del equipo chino, pero con una fidelidad reducida.
En un artículo de opinión, el físico cuántico francés Frédéric Grosshans, de la Universidad París-Saclay, en Orsay, indica que "estos dos experimentos muestran claramente que el teletransporte a través de distancias metropolitanas es tecnológicamente posible. Sin duda –añade– muchos experimentos de información cuántica interesantes en el futuro se basarán en estos trabajos".
Referencia bibliográfica:
Qiang Zhang et al. "Quantum teleportation with independent sources over an optical fibre network" "Nature Photonics (19 septiembre, 2016)
Wolfgang Tittel. "Quantum teleportation across a metropolitan fibre network". Nature Photonics (19 septiembre, 2016)