Un estudio de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universitat Jaume I apunta que las diferencias de género son fundamentales para estudiar y tratar enfermedades, entre ellas, las adicciones. Según los resultados, las mujeres presentan más vulnerabilidad a las drogas.
Desde hace años, José Antonio Oteo (Haro, 1960) lucha por acabar con la creencia de que las garrapatas son solo bichos repugnantes pero inofensivos. En La Rioja, dirige el Laboratorio de Patógenos Especiales del Centro de Investigación Biomédica, y es pionero en el estudio de dolencias que no han sido descritas con anterioridad.
Tras la confirmación ayer por parte de la Consejería de Sanidad de Madrid de dos casos de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo –un varón de 62 años, fallecido el pasado agosto, y una de las enfermeras que lo atendió, en la actualidad en la UCI–, son muchos los que se preguntan cuáles son los síntomas de la enfermedad y cómo se contagia a humanos.
Las sospechas se han ratificado. Sanidad ha corroborado que la muerte de un varón el pasado 25 de agosto y el posterior contagio de una de las enfermeras que lo atendieron se deben a fiebre hemorrágica Crimea-Congo. La paciente fue trasladada anoche a la Unidad de Aislamiento de Alto Nivel del Hospital La Paz Carlos III, donde permanece estable.
Las autoridades sanitarias están analizando la muerte de un varón el pasado 25 de agosto y el posterior contagio de una de las enfermeras que lo atendieron. Se sospecha que la causa sea fiebre hemorrágica. Se han remitido muestras al Centro Nacional de Microbiología para confirmar la patología. Los resultados se conocerán esta misma tarde.
Las personas que estuvieron expuestas a la radiación producida por las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki tienen un riesgo mucho mayor de padecer cáncer. Sin embargo, un nuevo estudio que tiene en cuenta más de 60 años de investigación médica concluye que los efectos nocivos a largo plazo en la salud de la población se han exagerado y son menores de lo que la población mundial y muchos científicos creen.
De las 135 mujeres que fueron asesinadas por su pareja en España en los años 2010 y 2011, solo una de cada cuatro había denunciado previamente a su agresor. A partir de los datos de ese período, un estudio concluye que no existe un menor riesgo de feminicidio entre las mujeres que denuncian la violencia machista. Se observa un fracaso en las medidas legales de protección.
Las personas que fuman, son sedentarias o beben demasiado alcohol tienen mayor probabilidad de morir debido al consumo de proteínas de origen animal, mientras que la sustitución de las carnes rojas por proteínas vegetales disminuye notablemente su riesgo, según un nuevo estudio. Lo curioso es que en individuos con un estilo de vida saludable estas relaciones no se observaron.