En las profundidades de los océanos y sin testigos, los equipos de pesca abandonados capturan a todos los seres vivos que se cruzan por su camino provocándoles la muerte. El informe que ha presentado hoy la Organización de Naciones Unidas (ONU) muestra las cifras de este problema, y propone soluciones para evitar la innecesaria muerte de miles de animales.