Investigadores del Instituto Catalán de Paleoecología Humana Evolución Social (IPHES) y la Universidad Pompeu Fabra han analizado el ADN mitocondrial de fósiles de Homo sapiens de la cueva de El Mirador, en Atapuerca, de hace entre 4.760 y 4.200 años. Los resultados revelan que aquellos individuos tenían afinidades genéticas con los de Oriente Próximo y Alemania.