Las interneuronas gigantes de una región del cerebro llamada núcleo accumbens desempeñan un papel importante en el control de la respuesta del cerebro a la cocaína. Así lo confirma un estudio, publicado esta semana en la revista Science, que sugiere que este conjunto de neuronas podría ser un objetivo útil para las terapias destinadas a alterar los efectos de la cocaína y otras drogas de abuso. Los autores, todo ellos investigadores de la Universidad de Stanford (EE UU), encontraron que las neuronas gigantes son activadas directamente por la cocaína y que silenciar dicha actividad durante la exposición a la droga en ratones interrumpe los efectos adictivos de la cocaína.