Investigadores del Hospital Clínic, liderados por el doctor Eduard Gratacós, han presentado los primeros biomarcadores para el diagnóstico precoz de daños cerebrales en niños de menos de un año mediante el uso de técnicas de la imagen que permiten estudiar las conexiones cerebrales. El proyecto de investigación de Gratacós, financiado con 1,2 millones de euros por la Obra Social la Caixa, se inició en enero de 2011 y ha demostrado, por primera vez en el mundo, que se pueden crear predictores individuales de desarrollo cerebral anómalo estudiando las conexiones cerebrales. Gratacós, jefe del Servicio de Medicina Maternofetal del Hospital, explicó ayer en rueda de prensa que los niños con retraso del crecimiento fetal tienen con frecuencia un desarrollo cerebral diferente que se manifiesta con trastornos neurológico y dificultades del aprendizaje, que si no se detecta antes de los dos años tiene una difícil solución.