Un equipo de ecólogos ha descubierto que el murciélago americano Lonchophylla robusta es capaz de bombear el néctar mediante unas ranuras en su lengua, en lugar de lamer este alimento como hacen otras especies. Este mecanismo de succión no se había observado antes entre los animales vertebrados.
La creciente brecha económica entre ricos y pobres está conduciendo a una segregación espacial cada vez más marcada en algunas ciudades europeas, según un estudio del Consejo Europeo de Investigación. Desde Oslo a Madrid, el trabajo compara un total de trece ciudades para medir la distancia física entre grupos poblacionales con poderes adquisitivos muy distintos.
Investigadores de la Universidad de Málaga han propuesto la inhibición selectiva de la glutaminolisis, una ruta metabólica esencial en muchos tipos de cáncer, como posible estrategia antitumoral. La revista Nature Medicine se hace eco de este trabajo, desarrollado en colaboración con centros científicos de reputación mundial.
Los aficionados a los espectáculos astronómicos tendrán que madrugar el próximo 28 de septiembre si quieren disfrutar del eclipse total de Luna, que se teñirá de rojo cuando la Tierra se interponga entre nuestro satélite y el Sol. En esta ocasión, además, la Luna estará en el punto más cercano de su órbita y se observará más grande.
Investigadores de la Universidad Jaume I, en Castellón, y otros centros europeos han diseñado un sistema para manipular, mediante campos electrícos, la fluorescencia de los nanocristales semiconductores, también conocidos como puntos cuánticos. El avance puede ampliar el abanico de aplicaciones que tienen estos dispositivos en el campo de la tecnología de imagen.
Bacterias como E. coli forman, para proliferar, un anillo que va estrangulando su membrana hasta que la célula original se convierte en dos. La proteína FtsZ es la base de esta estructura, pero el proceso no sería posible sin el apoyo de muchas otras. En un artículo publicado recientemente, investigadores del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC resumen cómo toda esta compañía de proteínas se coordina para que nada falle.
Investigadores del CNIO han hallado una mutación, en el gen POT1, que da lugar a un síndrome hereditario poco frecuente en el que los pacientes presentan múltiples tumores, entre los que se encuentran el angiosarcoma cardiaco. Ahora es posible identificar a los portadores e intervenir precozmente. Actualmente los pacientes tienen una escasa supervivencia, porque el tumor se diagnostica cuando está en fases muy avanzadas.