El aumento de temperaturas y precipitaciones beneficia al arbusto Spartium junceum, una planta invasora que se plantó hace décadas en los arcenes de la autopista que rodea al Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares. Un estudio de la Universidad Complutense de Madrid demuestra cómo la planta perjudica a un arbusto autóctono del parque, incluso aunque esta se erradique.