Ibiza y Formentera, además de un paisaje idílico de arena y agua cristalina, cuentan con extensas praderas submarinas de posidonia, una planta amenazada que ayuda a proteger las playas. Para preservarla se han puesto en marcha diversas medidas legales y de conservación. Manu San Félix, biólogo marino y fotógrafo, es uno de los precursores de una app que cartografía el fondo marino para evitar los anclajes de los barcos.
Científicos españoles han encontrado en la isla balear de Formentera un clon de Posidonia oceánica, una planta marina endémica del mediterráneo. Según sus investigaciones se trata de la especie más longeva de la biosfera, con 100.000 años de edad.