La compañía SpaceX ha lanzado con éxito su nave y cohete, el más grande y potente jamás construido, aunque estalló antes de completar su vuelo de prueba. Esta experiencia de aprendizaje se volverá a intentar dentro de unos meses, según Elon Musk. El objetivo final es contar con un sistema para llevar a los humanos a la Luna, Marte y más allá.
El despegue de la nave Starship y el cohete Super Heavy, el más potente construido hasta ahora, se suspendió este lunes por problemas técnicos. La compañía de Elon Musk lo volverá a intentar este jueves 20 de abril.
La tripulación incluye a la primera mujer y el primer hombre negro en viajar alrededor del satélite. La misión pretende establecer una presencia humana permanente en el espacio profundo y lo aprendido sobre la superficie lunar será de utilidad para el próximo gran objetivo: enviar los primeros humanos a Marte.
El impacto de meteoritos en nuestro satélite ha propiciado la formación de un material vidrioso que, bajo los efectos del viento solar, es capaz de almacenar hasta 2,7 × 1014 kg de agua en todo el suelo lunar. Así lo aseguran científicos chinos tras analizar las muestras recogidas por su nave Chang'e 5.
Una indumentaria más flexible y resistente, mejoras en las botas y los guantes, un casco con luces y cámara de alta definición, más un elemento tradicional: el pañal. Así es el prototipo mostrado en Houston (EE UU) en negro y naranja, aunque el que llevarán los y las astronautas a partir de 2025 al suelo lunar probablemente sea blanco.
Habrá al menos seis vuelos tripulados y uno de ellos realizará el primer paseo espacial privado de la historia. Tres misiones cuentan con participación española y una de ellas estudiará la habitabilidad de las lunas heladas del sistema solar.
Sara García y Pablo Álvarez algún día podrían viajar al espacio. / Wearbeard