Un grupo de profesores y estudiantes de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia han desarrollado una aplicación, utilizando Kinect, el sensor de movimientos de la consola Xbox de Microsoft, para mejorar las cualidades motoras de personas con parálisis cerebral. El sistema utiliza Kinect para crear un esquema digital del cuerpo del paciente, basándose en datos de profundidad, capturando los movimientos y trasladándolos al juego.
José Miguel es una persona totalmente dependiente. La parálisis cerebral que padece le impide controlar de forma voluntaria cualquier parte de su cuerpo, excepto la cabeza, que puede mover de arriba hacia abajo. Desde hace apenas unas semanas, este chico del centro de Apace (Asociación de Padres de Personas con Parálisis Cerebral) tiene absoluta autonomía para manejar un ordenador y navegar por internet sin realizar más esfuerzo que dirigir los movimientos de su cabeza. Esto es posible gracias al Proyecto Wiimo, una tecnología desarrollada por dos alumnos de la Universidad de Burgos, Álvaro Arbaizar y Fernando Ibeas, como proyecto de fin de carrera.