Este epidemiólogo se presentó en la redacción neoyorkina de Nature para explicar por qué debían aceptar el estudio que había coordinado. Su estrategia funcionó, y la revista de referencia científica mundial acaba de publicar un artículo consensuado por casi 400 expertos de más de 100 países con recomendaciones prácticas para acabar con la amenaza del coronavirus que aún no ha terminado.
Esta enfermedad respiratoria puede resultar mortal para muchos animales carnívoros, entre ellos los lobos, protagonistas de #Cienciaalobestia. Una nueva investigación señala que el virus impulsa la evolución del color del pelaje y la capacidad de aparearse de estos cánidos.
El grupo de pediatría del Hospital La Paz analizó datos de más de 450 menores atendidos por coronavirus en el 2020 en los hospitales La Paz, Niño Jesús y Severo Ochoa de Madrid. Según sus resultados, un 14,6 % de los niños estaban sintomáticos tras 12 semanas, y otro 18,4 % presentaba síntomas transcurridas de 4 a 12 semanas tras la infección.
Un estudio liderado por investigadores chinos muestra que estos virus pueden manipular el microbioma de la piel de sus huéspedes, alterar su olor y hacerlos más ‘apetitosos’ para los mosquitos vectores. El equipo ha observado en ratones que un medicamento usado contra el acné podría contrarrestar este efecto.
Este sistema, desarrollado por investigadores del CSIC y la Universidad de Valencia, aúna la rapidez de los test de antígenos y la precisión de las PCR para detectar el SARS-CoV-2 mediante la herramienta de edición genética CRISPR Cas9.
Un enfermo inmunodeprimido que padecía una infección cutánea grave por M. chelonae ha sido tratado con éxito con un único bacteriófago, junto con antibióticos y cirugía. La terapia, diseñada por un equipo de EE UU, ha mostrado gran eficacia y nulos efectos adversos.
Gracias a las muestras recogidas por la expedición Tara Oceans, un equipo internacional de científicos ha podido identificar miles de nuevos virus en el océano que permitirán arrojar luz sobre la vida en la Tierra y su evolución. Esta información es fundamental para la detección de pandemias y epidemias.
Monocitos y macrófagos que han sido infectados por el SARS-CoV-2 estarían detrás de esta reacción, según un nuevo estudio publicado en la revista Nature. Los hallazgos del trabajo también revelan que los anticuerpos desarrollados durante el contagio podrían contribuir a dicha respuesta inflamatoria.
Un nuevo estudio revela que casi 600 familias de genes presentes en las plantas modernas proceden en realidad de microbios y virus. El trabajo sugiere que la transferencia horizontal de genes, un proceso más común en bacterias y que consiste en el intercambio genético entre especies diferentes, permitió que las especies vegetales se adaptaran a entornos drásticamente diferentes, como cuando pasaron del agua a la tierra.