Uno de los métodos utilizados en el laboratorio para la extracción de compuestos fenólicos a partir de residuos del cultivo del mango se puede aplicar para la producción masiva y el comercio de este fruto tropical. Así lo señala un estudio de investigadores de la Universidad de Cádiz basado en modelos matemáticos.
Desde hace décadas se conoce la capacidad antioxidante de los líquenes, aunque apenas se ha investigado desde el punto de vista farmacológico. Investigadores de la facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid han revisado cerca de un centenar de estudios donde, mediante modelos celulares y animales, se describen las posibles aplicaciones terapéuticas de estos organismos.
Por la cantidad relativamente baja de vitamina C en el tomate, uno de los frutos de mayor consumo en la dieta mediterránea, investigadores andaluces han aumentado por primera vez esa proporción en un 15% y lo han logrado gracias a técnicas de ingeniería genética. Según el estudio, los científicos transfirieron el gen de la fresa, que tiene mayor contenido en este nutriente, a la planta del tomate para crear un producto con aporte extra de vitamina C y una mayor capacidad antioxidante.
Una investigación analiza la coenzima Q10, cuya deficiencia causa una rara enfermedad mitocondrial que se da sobre todo en niños. Los autores pretenden así modular la síntesis de CoQ10 en células humanas en función de las necesidades metabólicas de las mismas.
Investigadores de las universidades de Salamanca y Vigo han desarrollado un método para identificar los componentes antioxidantes de la miel más rápido, barato y eficiente que los empleados en la actualidad. Han analizado mieles de Galicia con técnicas de espectroscopía de infrarrojo cercano.
Beber dos tazas de chocolate al día puede ayudar a las personas mayores a mantener su cerebro sano y sus habilidades cerebrales agudas, así lo aseguran investigadores de la Escuela de Medicina de Harvard en Boston (EE UU) en la última edición de la revista Neurology de la Academia Americana de Neurología.
Científicos de la Universidad de Huelva han identificado una nueva molécula orgánica, la selenimetionina, que podría convertirse en un elemento innovador para la suplementación de la dieta con selenio, dados sus beneficios antioxidantes. En el marco del proyecto de excelencia Estudio analítico de selenobiomoléculas en la producción biotecnológica de alimentos funcionales ricos en selenio, financiado con 180.000 euros por la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia, los investigadores buscan nuevos productos alimenticios funcionales enriquecidos con selenio a partir de microalgas.
Estudian el poder antioxidante del aceite de oliva en enfermos de fibromialgia.