Un equipo de investigadores de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) ha publicado este mes un trabajo donde se estudian las variaciones del gen FOXI1 en poblaciones humanas. El trabajo apunta hacia una adaptación reciente, posiblemente al clima, que podría explicar por qué ciertas variantes de dicho gen han sido seleccionadas positivamente entre las poblaciones africanas pero no en otros grupos del resto del mundo que han estudiado. Según los autores, este hecho confirió en algún momento ventajas evolutivas a sus portadores.