La Escuela de Fisioterapia de la Universidad de Alcalá desarrolla un proyecto pionero en España que demuestra que la fisioterapia aplicada precozmente es capaz de prevenir y retrasar la aparición de linfedema en mujeres sometidas a cirugía por cáncer de mama.
Un estudio de la Unidad de Investigación Traslacional que el Instituto Catalán de Oncología tiene en Girona ha descrito el mecanismo por el que las células cancerígenas se vuelven resistentes a ciertos fármacos. En concreto, los científicos han visto que en el subtipo de cáncer de mama denominado HER2+ las células malignas utilizan la autofagia, un proceso de digestión de los propios elementos de la célula, para hacerse resistentes a los anticuerpos monoclonales.