Investigadores españoles y etíopes confirman el potencial alimenticio de la harina de tef, un cereal sin gluten que procede de Etiopía. Los científicos han profundizado en sus características físico-químicas y nutricionales y han analizado su aplicación a nuevos productos alimentarios. El tef es muy poco conocido y tiene una gran diversidad de variedades, escasamente caracterizadas.
Un estudio del Museo Nacional de Ciencias Naturales ha analizado experimentalmente el balance energético de varias formas de cultivo durante más de 15 años en la finca experimental de La Higueruela (Toledo), adquirida por el CSIC en 1972. Sus resultados indican que en ambientes semiáridos la agricultura ecológica es más productiva que los sistemas en los que se utilizan productos agroquímicos.
Los panes fabricados con determinadas variedades de dos especies de trigo presentan unas propiedades sensoriales que se pueden diferenciar, según un estudio de investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid. El hallazgo plantea que estas propiedades que afectan a los sentidos se podrían considerar en los trabajos de mejora genética del cereal.
El Grupo Biotecnología Industrial y Medioambiental de la Universidad de Burgos investiga la extracción de este tipo de compuestos antioxidantes con el objetivo de utilizarlos como aditivos naturales para preservar alimentos.
Investigadoras de la Universitat Politècnica de València han obtenido nuevos productos fermentados con bacterias probióticas a partir de licuados de cereales y frutos secos –lo que se conoce como leches vegetales–, que constituyen una alternativa a los yogures convencionales. Los productos están especialmente dirigidos a personas con problemas de alergia a la leche de vaca, intolerancia a la lactosa o al gluten, así como a niños y mujeres embarazadas.
Durante la llamada revolución verde de los años 60, un movimiento que cambió las prácticas agrarias en muchas explotaciones de todo el mundo, se aplicaron técnicas de mejora genética para obtener variedades de cereales de talla reducida, más resistentes y productivos. Algunas mutaciones similares a las que se obtuvieron artificialmente durante dicha revolución también se transmiten de manera natural en poblaciones de la planta Arabidopsis thaliana, según un artículo publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.
Investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) han desarrollado una metodología precisa, sencilla y barata para determinar el contenido de vitaminas B1 y B2 en cereales. La industria puede aplicar la técnica en el control de calidad de estos elementos.
Según el último informe de la oficina de estadística de la Unión Europea (UE), Eurostat, en 2008 España era el país europeo que destinaba una mayor superficie a la agricultura ecológica: 1,3 millones de hectáreas, seguido de Italia, Alemania, Reino Unido, y Francia. Entre 2005 y 2008, España también ha tenido el mayor aumento de campos para la agricultura ecológica.
Un grupo de investigadores del Departamento de Química Agrícola de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) estudia la forma de aplicar un subproducto de la industria papelera a los fertilizantes que contienen integrado cinc (Zn) para aumentar la disponibilidad de este elemento en los cultivos que se realizan en suelos calcáreos o con pH alto.