Tres investigadores españoles han descubierto que las personas bilingües utilizan diferentes redes neuronales para leer idiomas que se pronuncian como se escriben –caso del euskera– o en los que no existe esta correspondencia, como el inglés. Los resultados son valiosos para la enseñanza de la lectura en adultos y niños.
Científicos de la Universidad de Cantabria han descrito cuáles son las bases genéticas que determinan el tamaño del cerebro en las primeras fases del desarrollo. Los expertos han identificado cinco nuevos lugares del genoma, y replicado otros dos descritos con anterioridad, asociados con el volumen intracraneal.
Investigadores de Málaga y Granada han publicado en el International Journal of Neural Systems una nueva técnica para detectar la enfermedad de Alzheimer. Basado en conceptos de inteligencia artificial, el sistema puede aplicarse a otras patologías como el párkinson.
Un nuevo estudio demuestra cómo el cerebro simula recompensas externas para impulsar la formación de la memoria. Los resultados, publicados en eLife, han sido desarrollados por investigadores del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge.
Sonido, luces, formas, interacción y movimiento son las herramientas que utiliza Elements, una obra artística digital diseñada para la rehabilitación de personas con lesiones cerebrales, y que cuenta con una gran aceptación entre los pacientes. Ciencia y arte confluyen para crear una estética única y mejorar la salud.
Iniciarse en el consumo de alcohol entre los once y los trece años se relaciona con un mayor riesgo de sufrir alteraciones psicológicas en el futuro, según revela un estudio en el que participa la Universidad Complutense de Madrid. Los síntomas más frecuentes de los más de 3.000 adolescentes que participaron en la investigación fueron malestar corporal, hostilidad y agresividad.
Las terapias basadas en mindfulness están en auge, y si les añadimos un toque de neurociencia los resultados de búsqueda en Google se disparan. De este dueto nacen los tratamientos de neurofelicidad, que utilizan la meditación y la realidad virtual para enseñar a nuestro cerebro a ser más feliz. Pero no todos cuentan con el respaldo de la evidencia científica.
Las terapias basadas en mindfulness están en auge, y si les añadimos un toque de neurociencia los resultados de búsqueda en Google se disparan. Imagen: WearBeard
Investigadores del Laboratorio de Neurociencia Celular de la Universidad Pablo de Olavide, de Sevilla, han descubierto los mecanismos de una forma de plasticidad en el hipocampo involucrada en el correcto desarrollo y funcionamiento de esta zona del cerebro de gran plasticidad. Los resultados del estudio acaban de ser publicados en la revista Cerebral Cortex.
Un equipo de neurocientíficos ha creado un mapa preciso de 180 áreas de la corteza cerebral –97 de ellas desconocidas hasta ahora– usando un software que ha incorporado datos procedentes de múltiples tipos de imágenes de resonancia magnética. Según los autores, los hallazgos podrían aplicarse en mejorar la cirugía del cerebro y en la investigación de la evolución cognitiva humana.