Odiada por gran parte del mundo, la fuente Comic Sans fue la elegida hace diez años por la investigadora del CERN Fabiola Gianotti al anunciar el descubrimiento del bosón de Higgs. Desde entonces, la controversia perdura y ha incitado el estudio sobre cómo el tipo de letra influye en la respuesta emocional del lector.
El 4 de julio de 2012 se anunció el hallazgo del bosón de Higgs durante uno de los eventos más seguidos en la historia de la ciencia. Una partícula elemental, difícilmente comprensible para el gran público, protagonizó 5.000 informativos de todo el mundo. Su éxito popular fue un cóctel de azar, búsqueda, misterio, literatura, un héroe individual y una enorme inversión.
La colaboración científica ALICE del Gran Colisionador de Hadrones del CERN ha conseguido observar por primera vez el efecto deadcone, una característica fundamental en la teoría de la fuerza nuclear fuerte. Esta une dos tipos de partículas, los quarks y los gluones, para formar protones, neutrones y, en última instancia, todos los núcleos atómicos.
Varias teorías predicen la existencia de una partícula elemental con un solo polo magnético, pero todavía no se ha encontrado ninguna. Ahora los científicos del experimento MoEDAL del Gran Colisionador de Hadrones del CERN muestran el camino para encontrarla con ayuda de los campos magnéticos más fuertes del universo.
La colaboración científica del Large Hadron Collider beauty del CERN ha observado una posible desviación de la llamada universalidad leptónica entre el electrón y el muon. De confirmarse, sería un indicio de violación del modelo estándar de física de partículas.
A diferencia del higgs, descubierto en 2012 en el gran colisionador de hadrones del CERN, físico teóricos de las universidades de Granada y Johannes Gutenberg en Alemania proponen la existencia de una partícula tan pesada que sería imposible de producir directamente en ese experimento. Podría ser una ventana para desentrañar los misterios de la materia oscura.
Las colaboraciones científicas CMS y ATLAS del Laboratorio Europeo de Física de Partículas han obtenido nuevos resultados que muestran cómo el bosón de Higgs se desintegra en dos muones, unas partículas similares al electrón pero más pesadas. Se calcula que solo uno de cada 5.000 higgs producidos en el gran acelerador LHC experimenta este fenómeno.
La colaboración científica LHCb del Laboratorio Europeo de Física de Partículas ha observado por primera vez una partícula exótica compuesta por cuatro quarks charm o encantados. En realidad está formada por dos quarks y dos antiquarks encantados.
Nuevas investigaciones sobre el bosón de Higgs, explorar la frontera de las altas energías, finalizar el LHC de Alta Luminosidad y promover un colisionador positrón-electrón que actúe como ‘factoría de higgs’. Estas son algunas claves de la estrategia presentada por el Consejo del CERN para guiar la física de partículas en Europa en los próximos años.
Son ingenieras, físicas, químicas y expertas en tecnologías de la información. Trabajan en el CERN, en Ginebra, varias de ellas en su famoso acelerador de partículas. Los laboratorios de este gran centro de investigación tienen una plantilla fija de unos 2.500 trabajadores, de los que un 20, 6 % son mujeres, según los datos oficiales. Estos días, como muchos de nosotros, teletrabajan desde sus casas tras el cierre de las instalaciones hasta nueva orden por la COVID-19.