Ampliamente distribuida por Eurasia y Norteamérica, la comadreja –la especie más pequeña entre los mustélidos– no muestra problemas aparentes. Pero un estudio realizado en las últimas dos décadas revela que este pequeño carnívoro es cada vez menos frecuente al noreste de nuestro país debido al cambio en el uso del suelo y al cambio climático.
El análisis de dos cráneos y tres mandíbulas almacenados durante décadas en el Museo Americano de Historia Natural arroja nuevas pistas sobre uno de los antepasados más enigmáticos de hurones, comadrejas y tejones. Un nuevo estudio, liderado por la Universidad Complutense de Madrid, confirma que Megalictis ferox era un depredador del tamaño de un jaguar que utilizaba sus dientes para triturar huesos, como hacen hoy las hienas, algo que se desconocía hasta ahora.