Un estudio del CSIC analiza la orientación de las estrías dejadas en los dientes por los utensilios. El trabajo muestra que los neandertales poseían un patrón de asimetría cerebral similar al del hombre actual, y que el uso preferente de una mano se establecía desde la infancia. Por otra parte, uno de los individuos estudiados cambió de mano dominante al final de su vida, debido a una infección bucal que afectó a su forma de utilizar las manos.