El Comité Olímpico Internacional (COI) anunció la semana pasada que, a la luz de una nueva técnica de control puesta a punto desde el Tour, revisará todos los análisis realizados a deportistas en los pasados Juegos Olímpicos en busca de la EPO de tercera generación. Esta sustancia, llamada CERA, es un activador continuo del receptor de la eritropoyetina, hormona producida por el riñón que estimula la producción de glóbulos rojos. Los científicos han desarrollado una técnica que combina análisis de sangre y orina con la que, por primera vez, se puede detectar.