Investigadores de la Universidad de Salamanca han analizado cuáles son los efectos de los compuestos flavonoides, sustancias que el hombre consume a través de los vegetales y que parecen tener efectos beneficiosos para la salud, en un gusano que se emplea como organismo modelo en estudios biomédicos, el Caenorhabditis elegans. Centrados en el metabolismo de estos compuestos, el grupo ha descubierto que la forma en la que son procesados es similar en el nematodo y en el cuerpo humano.
Cada año se tiran más de medio millón de toneladas de residuos de cebolla en la Unión Europea, pero según los científicos se podrían aprovechar como ingredientes alimentarios. La piel marrón y las capas externas son ricas en fibra y flavonoides, y los bulbos que se descartan contienen compuestos azufrados y fructanos. Todas son sustancias beneficiosas para la salud.
La piel marrón y las capas externas de la cebolla son ricas en fibra y flavonoides.