Los niños que sufren algún trauma durante su infancia son más propensos a desarrollar problemas de salud de adultos. A los babuinos les ocurre lo mismo, aunque a ellos les afecten otros factores. Según un estudio, las adversidades infantiles de algunas hembras de babuino, protagonistas de nuestro #Cienciaalobestia, reducen casi a la mitad su esperanza de vida en edad adulta.
La decisión de dar teta o biberón es una de las que más inquietan a las madres recientes. Una opción personal se ha convertido en objeto de un debate social donde se cruzan razones científicas con modelos de crianza y conciliación. Mientras unos acusan a las que no amamantan por privar a sus bebés de una fuente de salud y apego, otros murmuran cuando un niño con dientes baja el sostén a su madre. Hoy nadie duda de los efectos positivos de la lactancia materna; sin embargo, algunos estudios cuestionan sus propiedades protectoras a largo plazo.
Infografía del informe sobre obesidad infantil de la OMS. / Efe
Una investigación de la Universitat Autònoma de Barcelona y la Universitat de les Illes Balears constata que los niños de primaria que hacen deporte entre dos y cinco horas a la semana y duermen entre nueve y diez horas al día obtienen mejores resultados académicos. El estudio alerta de la existencia de una pauta de descanso nocturno insuficiente e irregular cada vez más frecuente en niños y adolescentes.
Un estudio internacional ha comparado en hermanos cómo influye haber pasado por experiencias traumáticas repetidas en la infancia o en la adolescencia en el riesgo de sufrir psicosis de adultos. Los resultados indican que en estos casos la posibilidad se multiplica por siete. Igualmente, haber sido intenso consumidor de cannabis durante la infancia o adolescencia multitiplica esta probabilidad por seis.
La neofobia alimentaria es el miedo o rechazo a probar alimentos nuevos. Es una característica típica en el desarrollo infantil, pero puede llegar a ser habitual en algunos adultos. Investigadores de la Universidad del País Vasco han comprobado en niños y niñas de entre 8 y 16 años que los neofóbicos presentan un menor índice de calidad de su dieta mediterránea, además de tener mayor ansiedad y menor autoestima.
Amamantar a un niño durante seis o más meses se asocia con un riesgo menor de sufrir leucemia infantil, comparado con los bebes que nunca fueron amamantados o que tomaron el pecho durante un periodo de tiempo muy corto. Esto es lo que sugiere un nuevo estudio en el que los autores han revisado 18 investigaciones sobre la relación entre leche materna y este tipo de cáncer en niños.
Los vehículos, sobre todo los diésel, emiten partículas PM2,5 que tienen efectos nocivos para la salud. / SINC
Las partículas de menos de 2,5 micras que emiten los vehículos afectan de forma negativa a la bronquiolitis, neumonía, asma y bronquitis infantil. Si se redujeran sus concentraciones a los niveles recomendados por la OMS, disminuirían los ingresos de niños con estas enfermedades en el hospital y supondría un ahorro diario de 200 euros, según un cálculo efectuado por investigadores de la Universidad de Sevilla en esa ciudad.
Según las conclusiones de una investigación realizada por el profesor de la Escuela de Magisterio de Bilbao, José Domingo Villarroel, a más edad, más realismo al representar la vida vegetal. La revista “Journal of Biological Educatión” editada por la Society Biology, ha publicado la investigación.