Un estudio liderado por investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) apunta a la hipertrigliceridemia como potencial marcador para la detección temprana del síndrome metabólico y la diabetes, así como del riesgo de enfermedades cardiovasculares. La hipertrigliceridemia es el trastorno lipídico más común en pacientes con infarto de miocardio no fatal y se caracteriza por un nivel elevado de triglicéridos en el plasma.