Una región del cerebro que se extiende por los dos hemisferios, el planum temporale, es mayor en el izquierdo que en el derecho. El hallazgo se vinculó en la década de 1960 con la localización del procesamiento del lenguaje en el hemisferio izquierdo, pero hoy investigadores europeos muestran que esta asimetría no es un marcador de la lateralización del lenguaje.