Científicos del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA) han analizado la presencia de contaminantes emergentes en granos de trigo, avena, cebada y arroz. Aunque en concentraciones muy pequeñas, en todas las muestras apareció bisfenol A y nonilfenol, sustancias con potencial actividad como disruptores endocrinos. En algunos cereales también se encontraron restos de ibuprofeno.
La tecnología ambiental llamada biorremediación podría ser una alternativa para disminuir las concentraciones de nonilfenol, un compuesto estrogénico presente en algunos ambientes acuáticos de Cataluña. Estos compuestos actúan sobre los animales y en el sistema endocrino humano alterando sus funciones reproductivas