Los gorilas de montaña se desplazan apoyando las manos en el suelo de formas muy diversas y no solo con los nudillos, como se creía hasta ahora. Un nuevo estudio internacional demuestra que el 40% de los grandes simios estudiados presentaban posturas diferentes de apoyo, algunas nunca observadas anteriormente en gorilas. El hallazgo pone en cuestión el modelo actual de evolución del bipedismo en los homininos.