Cualquier papel en dos dimensiones puede transformarse en una forma tridimensional estable por medio de pliegues. Con esa premisa, investigadores de la Universidad de Harvard (EE UU) han conseguido crear grandes estructuras inflables, como arcos o refugios, que se mantienen rígidos al cesar el suministro de aire. Los responsables del hallazgo creen que tiene un gran potencial para su uso en catástrofes naturales.
La papiroflexia ha servido de inspiración a científicos de la Universidad de Harvard y el MIT para idear un método de construcción de máquinas que se doblan y autoensamblan sin ayuda externa en cuatro minutos. Estos robots se podrían utilizar en operaciones de búsqueda y rescate en edificios colapsados.