Su misión iba a durar seis meses, pero una avería en la nave Soyuz a bordo de la que debía regresar a la Tierra ha prolongado su vuelo espacial hasta los 371 días, un récord para Estados Unidos. Junto a los cosmonautas Sergey Prokopyev y Dmitri Petelin este miércoles ha aterrizado en Kazajistán.
Un estudio ha comparado las variables biológicas del astronauta Scott Kelly, que pasó casi un año en órbita, con las de su gemelo idéntico, Mark, que vivió ese tiempo en la Tierra. Los resultados muestran que los viajes espaciales largos causan más cambios en la expresión génica que los cortos, especialmente en el sistema inmunitario y en la reparación del ADN. Sin embargo, no se han visto diferencias significativas en la salud de los hermanos.