Entrevista a Agustín Chicarro, responsable científico de las misiones a Marte de la ESA

“China va a jugar un papel decisivo en el espacio”

El geólogo planetario Agustín Chicarro (Madrid, 1956), responsable científico del Programa de Exploración de Marte de la Agencia Espacial Europea (ESA), explica a SINC los detalles del curso que acaba de terminar en la Escuela Avanzada de Marte en Jiaxing, en China, un país que el próximo octubre lanzará su primera misión al planeta rojo.

“China va a jugar un papel decisivo en el espacio”
A. Chicarro entrevistado por los medios chinos. Imagen: ESA

¿Cómo se ha desarrollado la Escuela Avanzada de Marte en China?

El objetivo de esta escuela de verano ha sido establecer una estrecha colaboración entre Europa y China con el fin de promover las ciencias planetarias, y Marte en particular, ya que hacia allí enviarán los chinos un satélite en otoño. La parte logística del encuentro ha sido china, y la parte docente (de la que he sido el responsable) europea. La idea de organizar este encuentro surgió durante mi visita el año pasado a Taiwán, donde ya trabajé hace tiempo como profesor, y cuyas relaciones con China continental han mejorado mucho con la elección de su actual presidente. Elegimos la localidad de Jiaxing, provincia de Zhejiang, a unos 100 kilómetros de Shanghai, y una fecha que coincidía con el eclipse total de sol, que, por cierto, no pudimos observar debido a una gran tormenta.

Entre el 20 y el 24 de julio, hemos tenido un programa muy denso desde las ocho de la mañana hasta las nueve de la noche. Por la mañana se impartían clases teóricas sobre la geofísica del interior y geología de la superficie de Marte, su atmósfera, planetología comparada y las misiones de la ESA. Por la tarde las clases eran más prácticas, y los 40 estudiantes que participaron aprendieron a gestionar datos geológicos y atmosféricos, obtenidos sobre todo por la misión Mars Express. Por las noches se realizaban presentaciones más especificas, por ejemplo sobre la misión que China va a lanzar a Marte y que a todos nos interesaron mucho.

¿En qué va a consistir esta misión?

China lanzará el próximo octubre un microsatélite para estudiar la interacción del viento solar con la parte superior de la atmósfera de Marte, la ionosfera. La misión no es muy grande, ya que es la primera que dirigen hacia el planeta rojo, y se lanzará con el mismo cohete que utilizarán los rusos para enviar la sonda Fobos-Grunt, con la que se pretende obtener muestras de Fobos, uno de los satélites naturales de Marte. El campo de actuación del pequeño orbitador chino, denominado Yinghuo-1 (Luciérnaga-1), dependerá en gran medida de donde los pongan en órbita los rusos. Es el primer intento de misión a otro planeta, después de la Luna, y se ha empezado de forma muy razonable.

¿Qué papel puede desempeñar china en la exploración espacial?

Las ambiciones de este país con respecto a temas relacionados con la astronomía, como la fabricación de grandes telescopios o las misiones espaciales a otros planetas, son enormes y se van a afianzar en un futuro cercano. Tienen planes realmente muy ambiciosos, incluido el envío de vuelos tripulados. China va a jugar un papel decisivo en el espacio en los próximos años. De hecho ya es la tercera potencia que puede lanzar astronautas de forma independiente. Hasta ahora sólo lo habían conseguido EE UU y Rusia, porque Europa, en realidad, lo que ha hecho es colaborar con estadounidenses y rusos para que lo envíen ellos. Europa no ha sabido tener la visión de grandeza que tuvieron EE UU y Rusia en su tiempo, y ahora China.

Las primeras misiones planetarias son casi siempre a la Luna (excepto Europa, que fue primero a Marte), y tanto China, como Japón e India, lo han hecho así en los últimos años, pues es lo más fácil, aunque no lo más interesante. Pero ahora estos tres países asiáticos están dando un giro de 180º para ir a Marte, que es lo que realmente interesa a la comunidad científica internacional desde muchos puntos de vista.

¿Cuál es su papel como responsable científico de las misiones a Marte de la Agencia Espacial Europea?

Este mes ha cambiado. Hasta el 1 de julio era el responsable científico de la misión Mars Express, con la que llevamos ya cinco años explorando el planeta, y sigue funcionando perfectamente. Mi trabajo ha sido asegurar que la ciencia se realizaba de forma adecuada y que los instrumentos se operaban correctamente. Ahora he sido nombrado responsable científico del Programa de Exploración de Marte, de todas las misiones a Marte.

¿Y cómo se plantean los próximos años?

Estamos poniendo en marcha un programa conjunto con la NASA. A partir de ahora no va a haber un programa europeo y otro estadounidense a Marte. En 2016 se lanzará un satélite para estudiar el metano de la atmósfera y ver si está relacionado con la vida. En 2018 se enviarán un par de rovers, uno europeo y otro americano, para estudiar los indicios o restos de vida. El Centro de Astrobiología (INTA-CSIC) participa en la fabricación de algún instrumento de estas misiones. También está previsto poner en marcha en 2020 una red de seis u ocho pequeñas estaciones en la superficie del planeta para estudiar su clima y estructura interna, algo que no se puede realizar por muchos rovers que mandemos. Esperamos que China y otros países, como Rusia y Japón, se unan a esta misión.

¿Cuál es el interés de Marte?

Es el planeta que más se parece a la Tierra. Tiene una historia geológica compleja de vulcanismo, fenómenos glaciares, con un clima variable, viento y casquetes polares. Además es el único planeta donde en un futuro previsible, en varias décadas, los seres humanos podrán ir. Sin olvidar que también podría presentar algún indicio de vida.

¿Cómo ve la posibilidad de encontrar vida en este planeta?

Sería un gran paso demostrar que el metano que hay en su atmósfera está ligado a la vida. No hay ningún otro sitio tan favorable dentro del Sistema Solar y hay muchos indicios a su favor: su clima pasado mucho más calido, con agua en su superficie, con una atmósfera densa hace unos 4.000 millones de año. Pero ¿qué ha ocurrido desde entonces? Suponiendo que la vida llegara a surgir ¿quedan restos? Nadie lo sabe.

De todas formas aunque la respuesta sea negativa seria muy importante, porque lo que no se sabe es si la vida es algo fácil o difícil en el Universo. Al tener sólo un ejemplo, desconocemos si la vida se forma fácilmente, si se dan ciertas condiciones (químicas, temperatura, presión...) o, por el contrario, el número de condiciones y casualidades que se necesita es muy grande. Yo soy más de esta segunda escuela, y pienso que crear vida es muchísimo más complejo de lo que muchos astrónomos inocentemente consideran.

¿Algún deseo especial para el futuro?

Me gustaría que la gente, los políticos sobre todo, comprendieran que el espacio no es algo caro, contrariamente a lo que a menudo se piensa. Hay un debate, un tanto falso, sobre las prioridades que debe tener la sociedad, y se critican los gastos destinados a la exploración espacial, pero no creo que sea para tanto. Una misión como Mars Express vale lo mismo que construir diez o veinte kilómetros de autopista. ¿Qué país no se lo puede permitir?

Fuente: SINC
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