Ante el fraude masivo en el mercado del éxtasis, se recomienda precaución a los consumidores de drogas

El éxtasis es una de las drogas ilegales más consumidas en espacios recreativos, sobre todo en entornos vinculados a la cultura de la música electrónica. Durante los últimos años, el servicio de prevención y análisis de sustancias del proyecto Energy Control (Asociación Bienestar y Desarrollo), con el apoyo del Departamento de Salud, de la Generalitat de Cataluña, y en colaboración con el Instituto Municipal de Investigación Médica de Barcelona (IMIM-Hospital del Mar) ha venido comprobando la composición de pastillas de éxtasis, que en su gran mayoría contenían MDMA como principal principio activo, con escasas adulteraciones.

Ante el fraude masivo en el mercado del éxtasis, se recomienda precaución a los consumidores de drogas
Foto: Xtylerclub.

El éxtasis es una de las drogas ilegales más consumidas en espacios recreativos, sobre todo en entornos vinculados a la cultura de la música electrónica. Durante los últimos años, el servicio de prevención y análisis de sustancias del proyecto Energy Control (Asociación Bienestar y Desarrollo), con el apoyo del Departamento de Salud, de la Generalitat de Cataluña, y en colaboración con el Instituto Municipal de Investigación Médica de Barcelona (IMIM-Hospital del Mar) ha venido comprobando la composición de pastillas de éxtasis, que en su gran mayoría contenían MDMA como principal principio activo, con escasas adulteraciones.

No obstante, en los últimos tres años se vienen detectando los siguientes cambios en el mercado de esta sustancia: la cantidad de pastillas disponibles ha ido disminuyendo de forma progresiva. En su lugar, la MDMA suele venderse en el mercado negro en forma de polvo cristalizado. Conocida popularmente como cristal o eme, no se trata de una droga nueva sino de otra forma de presentación que resulta más sencilla y barata de producir, aunque se vende a mayor precio.

El cristal supone una forma de presentación que implica riesgos mayores para el consumidor. Es más fácil de adulterar por parte de los intermediarios y la posibilidad de sobre dosificación al calcular mal las dosis es mayor. Además, muchos consumidores creen que se trata de una droga distinta, lo que añade aún mayor confusión.

Las adulteraciones y fraudes en las pastillas que supuestamente contienen MDMA se han ido haciendo progresivamente más frecuentes. El número de pastillas sin MDMA y con la presencia de otros compuestos se ha incrementado de forma muy significativa.

La mayor parte de los preparados que se venden como cristal de MDMA son un fraude comercial (muchos sólo contienen piperonal, lidocaína, cafeína, fenacetina…) y los efectos sobre la salud de la combinación de los compuestos utilizados son todavía desconocidos.

Estos cambios se han agravado durante el primer semestre de 2009 de forma muy notoria. La disponibilidad de MDMA se ha reducido de forma significativa tanto en forma de pastillas como de cristal. Ello parece estar relacionado con problemas en la disponibilidad de los precursores químicos de síntesis que utilizan habitualmente los laboratorios clandestinos.

Recomendación

Ante esta situación, se recomienda a los consumidores de drogas extremar las medidas de precaución con cualquier sustancia adquirida. Se recomienda tener mucha prudencia a la hora de considerar sustituir el éxtasis por otras sustancias, como el speed, la ketamina y el nexus (2CB) que conllevan pautas de consumo y efectos muy diferentes a los del éxtasis.

Fuente: IMIM / Energy Control
Derechos: Creative Commons

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