La feria del sector pesquero en España, Sinaval-Eurofishing 2011, fue el marco elegido por Azti-Tecnalia, centro tecnológico especializado en investigación marina y alimentaria, para presentar dos tecnologías empleadas por sus investigadores con el fin de mejorar la eficiencia energética en el sector. En concreto se trata de un sistema de gestión de consumo de combustible en los barcos y un sistema para la monitorización y simulación por ordenador de artes de pesca.
El sector pesquero extractivo se enfrenta al reto ineludible de llevar a cabo una práctica de pesca responsable que garantice la sostenibilidad de los recursos marinos y del propio sector. Teniendo en cuenta este contexto y los altos precios de la energía, Azti-Tecnalia desarrolla un programa de innovación tecnológica dirigido a optimizar el consumo energético de los buques de pesca y el patrón de explotación en las pesquerías para una pesca responsable.
El centro tecnológico mostró su sistema ‘Gestoil’ al público que se acercó a Sinaval, una tecnología económica y de sencillo manejo que permite ahorrar carburante de manera significativa con un uso activo y hábil por parte de los patrones de pesca.
Con la herramienta ‘Gestoil’, el patrón del barco puede visualizar en el puente de mando el consumo instantáneo de combustible y, en consecuencia, estar en condiciones de poder optimizar dicho consumo. El uso proactivo de este sistema puede producir ahorros de hasta un 25 % en la modalidad de pesca a la cacea (en la que también se aplican otras artes de pesca), en torno a un 10 % en atuneros de cebo vivo, y entre un 2 % y un 9 % en la pesca de arrastre. Esta tecnología cuenta con la ventaja competitiva de su bajo coste, y es aplicable a todos los segmentos de la flota pesquera.
‘Gestoil’ incorpora en su software un modelo de consumo específico para cada buque pesquero, lo que permite estimar con gran precisión la cantidad de combustible que va a utilizarse en una ruta concreta, permitiendo evaluar consumos de prácticas operativas alternativas.
Otra de las tecnologías presentadas en la feria Sinaval fue un sistema de monitorización de parámetros fundamentales del funcionamiento de las dos modalidades de pesca activas —arrastre y cerco—, mediante sensores instalados en los puntos críticos del arte de pesca. Estos sensores proporcionan, entre otros datos, información en tiempo real sobre la geometría de las redes (dimensiones, aberturas, despliegue), su dinámica y su posición con respecto a la superficie o el fondo. Estos parámetros permiten desarrollar investigaciones sobre el funcionamiento dinámico de las artes de pesca para optimizarlas en términos de patrón de explotación, con vistas a una pesca más responsable. Estas investigaciones son luego trasladables a los propios pescadores para su implantación en la operativa de pesca comercial en base a las exigencias de una pesca más responsable. Por otra parte la monitorización del comportamiento de las artes de pesca permite optimizar los consumos energéticos necesarios para su operativa, particularmente en la modalidad de arrastre.
En paralelo al sistema de monitorización, Azti-Tecnalia aplica simulaciones por ordenador del funcionamiento de las artes de arrastre y cerco, que permiten conocer con detalle y mejorar la operativa de ambas modalidades de pesca antes de llevar a cabo las pruebas de validación en la mar en condiciones de pesca reales. Esta tecnología supone, igualmente, una herramienta eficaz para la formación continua de los pescadores en activo y de las personas que se están preparando para trabajar en el sector pesquero.
El pájaro robótico PigeonBot II, probado con éxito en un túnel de viento y de manera autónoma al aire libre, logra volar de manera similar a estas aves, sin aleta vertical. Sus aplicaciones abren el camino para diseñar aviones más eficientes en combustible.
La Fundación BBVA ha galardonado al informático japonés, de la Universidad Carnegie Mellon (EE UU), por crear los algoritmos que permiten a las máquinas comprender las imágenes y procesar los movimientos. Sus técnicas están presentes en los coches autónomos, los drones y todos los robots con capacidad de visión, como los que se usan en cirugía.
