Han participado científicos del CSIC en Galicia y Andalucía

Confirman la relevancia del Estrecho en el intercambio de carbono antropogénico con el Atlántico y el Mediterráneo

Los resultados de un estudio publicado en la revista Biogeoscience indican que el agua del Océano Atlántico tiene mayor cantidad de CO2 antropogénico que la del Mar Mediterráneo. Los investigadores han cuantificado por primera vez los flujos netos de carbono antropogénico a través del Estrecho.

Confirman la relevancia del Estrecho en el intercambio de carbono antropogénico con el Atlántico y el Mediterráneo

Aída F. Rios y Fiz F. Pérez, investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Instituto de Investigaciones Marinas (IIM, Vigo) han participado en un estudio cuyos resultados constatan la relevancia del Estrecho de Gibraltar en el intercambio de CO2 con el Atlántico y el Mediterráneo.

El estudio, que se enmarca en el proyecto internacional “Carboocean”, estuvo liderado por Emma Huertas, investigadora del CSIC en el Instituto de Ciencias Marinas de Andalucía. También participaron científicos del Departamento de Física Aplicada II de la Universidad de Málaga y del Institut National de Recherche Halieutique (INHR, Marruecos).

Con el objetivo de estudiar el intercambio de carbono antropogénico entre el océano Atlántico y el mar Mediterráneo, el equipo recogió muestras durante más de 2 años (2005-2007) en 8 estaciones fijas (denominada serie temporal GIFT) situadas en el Estrecho. Además, se recogieron medidas del intercambio de las masas de agua entre el Atlántico y el Mediterráneo a través del Estrecho.

“Al no poder distinguirse entre el carbono natural y el antropogénico medimos el carbono inorgánico total y posteriormente calculamos el carbono antropogénico utilizando además otras variables oceanográficas”, explican Aida F. Ríos y Fiz F. Pérez (CSIC).

Los resultados señalan la relevancia del Estrecho de Gibraltar en el intercambio de CO2 con el Atlántico y el Mediterráneo.

La importancia de este hallazgo radica, por una parte, en la trascendencia que ha adquirido en los últimos años cuantificar la concentración y distribución de carbono antropogénico almacenado en el océano al haberse confirmado, en base a estudios científicos, que el mar representa el mayor depósito de este dióxido de carbono liberado por la atmósfera como resultado de la actividad humana.

Por otra parte, si bien trabajos previos habían demostrado el papel relevante jugado por el Mediterráneo en la acumulación del carbono antropogénico en el Atlántico, es la primera vez que se cuantifican los flujos netos de carbono antropogénico a través del Estrecho.

Mayor cantidad de CO2 en el Atlántico

Las conclusiones del estudio se publican en el número 6 de la revista Biogeosciences y señalan que “el Estrecho de Gibraltar, única conexión del Mar Mediterráneo con el Océano Atlántico, juega un papel relevante en la circulación global del Atlántico, en su balance biogeoquímico y en su contenido en carbono inorgánico y alcalinidad, además de en los intercambios de carbono antropogénico y natural entre ambos mares”.

Con esta investigación se observó también que el agua del Atlántico tiene mayor cantidad de carbono antropogénico que el agua del Mediterráneo.

“El conocimiento adquirido incrementa la comprensión global del ciclo del carbono y permite establecer una línea de trabajo sobre posibles evoluciones futuras”, valoran los autores del estudio.

“En el actual contexto de cambio global, evaluar el transporte de carbono antropogénico a través del Estrecho es una cuestión relevante para poder conocer cómo los aspectos que afectan al Mediterráneo causarán cambios en la capacidad de acumulación carbono antropogénico del océano”, señalan.

En el estudio se sugiere, además, la necesidad de mantener en el área las medidas de transporte de agua y las variables del sistema para evaluar las evolución de los intercambios de carbono natural y antropogénico entre el Atlántico y en el Mediterráneo.

El proyecto Carboocean

El proyecto “Carboocean”, financiado por el VI Programa Marco de la Unión Europea y el Plan Nacional de I+D+I, se inició en 2005 y concluyó recientemente. Estuvo coordinado por Heinze, de la Universidad de Bergen. Aída F. Ríos y Fiz F. Pérez, del Instituto de Investigaciones Marinas (CSIC, Vigo) fueron los investigadores principales por parte española.

El objetivo del proyecto era realizar una evaluación precisa de las fuentes y sumideros de carbono en el mar. Además, un objetivo específico era evaluar el intercambio de carbono en el Mediterráneo y el Atlántico Norte a través del Estrecho de Gibraltar.

Los resultados suponen un importante avance en cuestiones desconocidas hasta el momento, tales como los sumideros de CO2 antropogénico de los océanos Atlántico y Austral; cómo contribuyen los ríos europeos y zonas de plataforma a los patrones a gran escala de las fuentes y los sumideros de CO2 antropogénico en el Atlántico Norte.

Fuente: CSIC Galicia
Derechos: Creative Commons
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