La recomendación sobre la gestión de la propiedad intelectual en actividades de transferencia de conocimientos de universidades y otras organizaciones de investigación públicas, adoptada recientemente por la Comisión Europea, reafirma el compromiso de transformar a la UE en la economía basada en el conocimiento más dinámica y competitiva del mundo, según han informado fuentes de la institución, y de acuerdo con la Estrategia de Lisboa.
Ayudar a los Estados miembros a desarrollar políticas y directrices en el ámbito de la gestión de la propiedad intelectual y las actividades de transferencia de conocimientos, así como promover el aprovechamiento de resultados de investigación financiada con fondos públicos, son los objetivos específicos de esta recomendación. En muchos casos esto implicará una cooperación más estrecha entre las organizaciones de investigación públicas y las empresas privadas, por ejemplo en colaboraciones entre la industria y la universidad. También se necesita más cooperación para ayudar a promover la innovación abierta, que permite la transferencia de conocimientos entre organizaciones con el objetivo de que sea aprovechada totalmente e introducida en el mercado.
Janez Potocnik, comisario de Ciencia e Investigación, se ha referido a esta recomendación declarando: “Necesitamos mejorar en lo que respecta a convertir los resultados de la innovación en innovaciones de éxito desde el punto de vista comercial y social. Una gestión correcta de la propiedad intelectual por parte de las organizaciones de investigación públicas es crucial para transferir el conocimiento a las empresas, para obtener licencias para nuevas tecnologías o para crear compañías spin-off. Hacer esto a escala europea ofrece nuevas oportunidades. No podemos permitir que invenciones importantes queden sin utilizarse en laboratorios o estantes de bibliotecas”.
La adopción de esta resolución sigue a la publicación de un número de informes estadísticos, como el cuadro de tendencias de la innovación europea («European Innovation Trendchart»), que muestran que, mientras Europa supera a otros países como Estados Unidos en la cantidad de licenciados en ciencias e ingeniería, todavía está rezagada en el ámbito de la innovación con respecto a Estados Unidos. Los expertos señalan que se necesita un modo para que Europa aproveche el potencial académico y lo aplique de manera que beneficie a la UE en la creación de empleo y la innovación del mercado, y esto es precisamente lo que se espera lograr con esta recomendación.
La Comisión despeja los miedos de quienes creen que dirigir las organizaciones de investigación públicas hacia la gestión de la PI y la transferencia de conocimientos se vería en conflicto, de algún modo, con su misión de educación e investigación. En su lugar, sostiene la Comisión, la recomendación apoyará el objetivo de estas organizaciones de generar beneficios socioeconómicos para la sociedad. Incluso se convertirá en un elemento clave para atraer a estudiantes, científicos y más financiación para la investigación, en particular del sector privado y a nivel internacional.
En la recomendación se resume también un Código de Prácticas que tanto los Estados miembros como las instituciones académicas podrían utilizar como base para introducir o adaptar legislación y directrices nacionales relacionadas con la gestión de la propiedad intelectual o la transferencia de conocimientos. El Código de Prácticas está compuesto de tres series de principios fundamentales: principios para una política interna de propiedad intelectual, principios para una política de transferencia de conocimientos, y principios para la investigación colaborativa y por contrato.
El Vicepresidente de la Comisión y Comisario de Empresa e Industria, Günter Verheugen, ha cometado sobre la recomendación que las universidades europeas y otras organizaciones de investigación públicas "deben participar más activamente en la explotación de los resultados de la investigación financiada con fondos públicos, ya que esto es necesario para fomentar la innovación y maximizar los beneficios de la investigación financiada con fondos públicos, de manera que podamos convertir la investigación científica en nuevos productos y servicios que den lugar a nuevas industrias y empleos".