Impedir que los jóvenes empiecen a fumar. Ese es el nuevo objetivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) con motivo del Día Mundial Sin Tabaco. Según la Encuesta Nacional de Salud 2011-2012 el tabaquismo afecta al 21,7% de los jóvenes entre 15 y 24 años.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha solicitado, con motivo del Día Mundial Sin Tabaco y a través del Convenio Marco para el Control del Tabaco, que los países incrementen los impuestos sobre el tabaco para reducir su consumo, especialmente entre los colectivos con menores ingresos, como los jóvenes, para impedir así que empiecen a fumar.
La OMS ha destacado que la subida de impuestos es la medida de control más eficaz en función de los costes. “La subida de impuestos ha demostrado ser una medida muy disuasoria, ya que su elevado precio restringe su acceso especialmente a los jóvenes, que por lo general dispone de ingresos limitados”, explica Carlos A. Jiménez Ruiz, experto de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
“De esta forma limitamos el crecimiento de las cifras de fumadores en nuestro país; no en vano, el consumo de tabaco es la principal causa prevenible de defunción en el mundo, y actualmente mata a uno de cada 10 adultos en todo el mundo”, añade.
En España, y según fuentes cercanas al sector, el Estado recaudó 9.119 millones de euros a través del IVA y los impuestos especiales del tabaco en 2013, lo que representa una caída del 2,8% respecto a lo recaudado en 2012. No obstante, los impuestos recaudados son inferiores a los sobrecostes sanitarios y sociales que este supone, cifrados en 16.475 millones de euros en 2008.
Desde la entrada en vigor de la Ley Antitabaco de 2006 la presión fiscal sobre el tabaco ha ido en aumento, al tiempo que desciende su consumo. Así lo recogen las conclusiones de la Encuesta Nacional de Salud 2011 – 2012: en el año 2012 el 24% de la población a partir de 15 años fumaba a diario, mientras que en 1993 lo hacía un 32,1%.
Con respecto a los jóvenes, el hábito tabáquico afecta al 21,7% entre 15 y 24 años, sin grandes diferencias por sexo –22,5% de hombres frente a un 21% de mujeres–.
A pesar de la caída del consumo, en 2006 se produjeron en España 53.155 muertes al año atribuibles al tabaquismo.