En el año 2011, el 94% de la población española estuvo expuesta a niveles de contaminación del aire superiores a los recomendados por la Organización Mundial de la Salud, según el informe anual de la calidad del aire presentado hoy en rueda de prensa por Ecologistas en Acción.
Como cada año, la asociación Ecologistas en Acción ha elaborado un informe en el que, utilizando datos procedentes de las redes de contaminación autonómicas, ha analizado la calidad del aire en España.
El documento toma datos de 2011 en todo el territorio español, exceptuando Ceuta y Melilla, y los compara con los valores máximos legales establecidos por la legislación europea y con los recomendados por la OMS.
Según Juan Bárcena, de Ecologistas en Acción, “el 94% de los habitantes de España, 44,3 millones de personas, respira aire contaminado si nos basamos en los límites recomendados por la OMS”.
Sin embargo, los máximos legales establecidos por la Unión Europea son, en palabras de Bárcena, “menos estrictos, y aun así el aire que supera estos límites es respirado por el 22% de la población”.
Por su parte, Mariano González, coordinador del área de transportes de la agrupación, ha explicado los distintos tipos de sustancias que se han tenido en cuenta. “Se han evaluado cuatro contaminantes: las partículas en suspensión, el dióxido de azufre, el dióxido de nitrógeno y el ozono troposférico”
Los resultados del análisis muestran que el ozono troposférico y las partículas en suspensión son las sustancias que más aparecen en cantidades superiores a las máximas recomendadas, y afectan a más del 75% de la población.
González ha señalado el tráfico rodado, que afecta a las áreas metropolitanas, y la actividad industrial como causas principales de estos niveles de contaminación, y ha explicado que el ozono puede aparecer en zonas alejadas de los núcleos urbanos, ya que se trata de “un contaminante secundario que resulta de reacciones químicas entre otras sustancias y puede expandirse”.
Mejoría por la crisis
Por otro lado, ha indicado que desde 2007 se mantiene una ligera mejoría que achaca, entre otras cosas, a un descenso en el consumo de combustibles debido a la crisis económica.
Además, Bárcena ha resaltado que la Unión Europea “estima que se producen unas 400.000 muertes prematuras al año en el continente como consecuencia de la contaminación, 20.000 de ellas en España, ocho veces más que por los accidentes de tráfico”.
Por último, desde la asociación han hecho un llamamiento a la concienciación de la sociedad y han recalcado la necesidad de reducir del transporte motorizado, así como de potenciar del transporte público y los medios no contaminantes.