El Centro de Tecnología Nanofotónica de la Universidad Politécnica de Valencia coordina el proyecto europeo TAILPHOX, dentro del programa FET (Future and Emerging Technologies), para desarrollar dispositivos fotónicos más eficientes usando tecnología de silicio. La idea es usar estructuras periódicas para poder controlar simultáneamente la energía transmitida a través de la luz (fotones) y del sonido (fonones), lo que puede dar lugar a aplicaciones de gran impacto en el mundo científico.
Dentro de estas aplicaciones, el objetivo más ambicioso que persigue el proyecto es obtener el láser de silicio, “uno de los hitos más ansiados de la investigación en el ámbito de las telecomunicaciones, una de las panaceas científicas ya que permitiría poder integrar la electrónica y la fotónica, lo que resultaría en chips más veloces y con un consumo eléctrico hasta un 50% menor”, explica Javier Martí, director del Centro de Tecnología Nanofotónica de la UPV.
Eficiencia paneles solares
Por otro lado, conseguir un dispositivo que sea capaz de controlar la energía de la luz y el sonido al mismo tiempo favorecería aumentar significativamente la eficiencia de las células fotovoltaicas. Se podría reducir de forma importante el tamaño de los paneles solares y su coste, comparado con las tecnologías actuales.
El proyecto TAILPHOX se centra en la interacción fotón-fonón, es decir, cómo con el sonido se controla la luz y con la luz el sonido (el fotón es la unidad mínima de luz y el fotón, de vibración).
En el caso de las células solares, recientemente se descubrió que la incidencia de la luz sobre los paneles induce una microvibración. Es decir, parte de la energía que se proyecta directamente sobre las células se está consumiendo al generar una onda de sonido, lo que impide que se pueda aprovechar toda esa energía que lleva la onda de luz, incidiendo así en la pérdida de eficiencia de los paneles.
“Si eres capaz de aprovechar que la energía de los fonones (sonido), que aparecen cuando la luz solar incide en el silicio, también contribuya a producir electricidad consigues aumentar de forma importante la eficiencia de las células solares”, destaca Javier Martí, director del NTC.
Por último, otra de las aplicaciones en las que se trabajará en este proyecto será una nueva metodología del control de la velocidad de propagación de la luz para implementar memorias ópticas y el desarrollo de sensores híbridos fotónicos-fonónicos.
El proyecto ha arrancado este mes de mayo y concluirá en el año 2012. Además del Centro de Tecnología Nanofotónica de la Universidad Politécnica de Valencia participan otros seis socios europeos, en concreto de Francia, Alemania y Grecia, todos ellos coordinados por el investigador del NTC, Alejandro Martínez. Cuenta con una financiación por parte de la Unión Europea de 2,1 millones de euros.