Un estudio del Instituto de Investigación en Atención Primaria (IDIAP Jordi Gol) demuestra por primera vez la eficiencia de la vacuna antineumocócica en neumonías no bacteriémica, que son las más frecuentes pero también las menos graves en personas mayores de 65 años.
Un reciente estudio del Instituto de Investigación en Atención Primaria (IDIAP Jordi Gol) que gestiona, promueve e impulsa la investigación en el primer nivel asistencial en Cataluña, ha analizado la efectividad vacunal en la población mayor de 65 años del Campo de Tarragona (Cataluña), demostrando por primera vez que la vacunación es efectiva tanto para prevenir cuadros bacteriémicos como no bacteriémicos.
Según Ángel Vila-Córcoles, investigador principal del estudio “este resultado confirma la eficiencia de la vacunación sistemática en personas mayores” y subraya la “necesidad de mejorar todavía mas las actuales coberturas vacunales que se situan en torno al 60% de la población diana para la vacunación antineumocócica”.
Los resultados muestran que se produjo una reduccón de un 42% del riesgo de padecer una neumonía neumocócica no bacteriémica entra las personas que recibieron la vacuna en comparación con las no vacunadas.
La pulmonía o neumonía está generalmente causada por bacterias o virus. Una de las bacterias más conocidas es en neumococo que provoca entre el 40 i el 50% de todas las pulmonías. Desde hace una década, la vacuna antineumocócica para los adultos se distribuye en Cataluña entra la población mayor de 60 años y entre las personas más jóvenes con situación de riesgo de padecer enfermedad neumocócica (bronquitis crónica, enfermedades del corazón, diabetes, etc…).
Contra el neumococo
Hasta ahora, esta vacuna sólo se había demostrado efectiva ante las neumonías neumocócicas que llamamos bacteriémicas o invasivas, en las que la bacteria invade la sangre (con el consiguiente riesgo de diseminación a otros órganos y aparición, por ejemplo, de cuadros muy graves de meningitis, sepsis o infección generalizada del organismo).
No obstante, este tipo de neumonía tiene una incidencia baja (aproximadamente 20 casos anuales por cada 100.000 personas/año), lo cual hacía dudar de la eficacia de la vacunación. Sin embargo, diversos estudios han demostrado que la vacuna ante estos cuadros más graves tiene una efectividad del 66%.
Por otro lado, el neumococo también da lugar a otro tipo de neumonías, en las que el microorganismo no llega a la sangre, son las neumonías que llamamos no bacteriémicas. Estas neumonías, que son en principio menos graves, son mucho más difíciles de diagnosticar con precisión con las pruebas de laboratorio convencionales y no habían sido consideradas habitualmente en los estudios que analizan la efectividad de la vacuna anti neumocócica.
En consecuencia, aunque las neumonías neumocócicas no bacteriémicas presentan cuadros mucho más frecuentes (aproximadamente 100 casos por cada 100.000 personas/año), considerando las dificultades diagnósticas, hasta ahora no se había demostrado la posible efectividad vacunal para prevenir estos cuadros.